Iván Duque asegura que Colombia rechaza el terrorismo como chantaje
EFE
El presidente de Colombia, Iván Duque, aseguró que el país rechazó hoy, con las marchas ciudadanas convocadas tras el atentado del ELN contra una escuela de policía en Bogotá «el terrorismo como chantaje» y la violencia como presión.
«Venimos ante este altar de Dios no solo a honrarlos y a recordarlos, sino también a enviar como sociedad un sonoro e inequívoco mensaje al mundo: Rechazamos el uso del terrorismo como chantaje y el uso de la violencia como mecanismo de presión a la sociedad», dijo Duque durante un oficio religioso en la Catedral Primada de Colombia.
La misa la ofició el cardenal Rubén Salazar en honor de los 20 cadetes que fueron asesinados el pasado jueves cuando estalló un coche bomba, atribuido al Ejército de Liberación Nacional (ELN), el mandatario reiteró que los colombianos «no se doblegarán jamás como sociedad ante el terrorismo».
Para el jefe de Estado, actos como el del ELN contra la Escuela de Cadetes de Policía General Francisco de Paula Santander, donde estudian uniformados de Colombia y otros países latinoamericanos, son «la degradación moral, la degradación ética y la pérdida absoluta de todos los valores».
Además, «buscan corroer los lazos que nos unen como sociedad e intimidarnos para que sacrifiquemos nuestra democracia y nuestra justicia».
Las palabras de Duque fueron aplaudidas en varias ocasiones por los asistentes, entre quienes se encontraban los familiares de varios de los cadetes muertos, que recibieron las condolencias del presidente y demás miembros del Gobierno nacional.
De los jóvenes hijos de estas familias Duque destacó «su vocación de servir» y la convicción de perseguir el «sueño hermoso y loable de convertirse en Policías de Colombia y Ecuador», toda vez que en el hecho también perdió la vida la cadete ecuatoriana Érika Sofía Chicó.
El presidente destacó que a las manifestaciones que se llevaron a cabo antes de la misa y que fueron convocadas por la ciudadanía a través de redes sociales acudieron políticos de diferentes corrientes y ciudadanos de todas las edades en varias regiones del país.
«Estamos convocados aquí para demostrar que a la hora de enfrentar el terror no reconocemos diferencias ideológicas ni de partido», comentó el mandatario.
Por ello, agregó, «todos somos Colombia cuando la violencia irracional ataca a nuestra juventud. Todos somos Colombia cuando la barbarie quiere chantajearnos y someternos. Todos somos Colombia cuando el terrorismo busca arrebatarnos la esperanza. Y todos somos y seremos Colombia para derrotarlo».
Al mediodía de este domingo la Catedral y sus alrededores se vieron abarrotados de gente que quiso acompañar hasta el último momento a los dolientes.
Una de estas personas fue María Claudia Acosta, de 44 años, quien aseguró a Efe que el terrorismo hace «que a uno le duela la patria».
También, Félix Guerrero, 70 años, manifestó que hoy fue «el momento de expresar ante los violentos que Colombia no está dispuesta a volver otra vez a las épocas del terrorismo, por lo que este acto es un respaldo sólido a la Policía y al Gobierno».
Como consecuencia del atentado terrorista del jueves Duque reactivó un día después las órdenes de captura contra los negociadores de paz del ELN que permanecen en Cuba y pidió al Gobierno de la isla que las haga efectivas.
El ELN inició en 2017 en Quito negociaciones de paz con el Gobierno colombiano que en mayo de 2018 fueron trasladadas a La Habana.
