Israel llega a la luna pero se estrella
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La sonda Beresheet, de fabricación israelí, alcanzó el satélite de la Tierra pero justo al buscar el alunizaje, se estrelló.
«Hemos llegado a luna pero no como queríamos», declararon los portavoces oficiales del proyecto que reunió capital privado para alcanzar el satélite natural. Israel esperaba convertirse en el cuarto país en conseguir colocar un aparato en la luna, después de Estados Unidos, Rusia y China.
El proyecto de la sonda lo iniciaron tres jóvenes profesionales ligados a la tecnología, que en una noche de fiesta, se imaginaron cómo podrían alunizar un aparato creado por ellos. Los jóvenes Yonatan Winetraub, ingeniero espacial, Yariv Bash, experto en ciberseguridad, y Kfir Damari, fabricante de drones, fundaron una compañía en 2011 y lograron reunir todos los fondos y mentes que sacaron a la luz la sonda que casi les dio la alegría y el logro de llegar a la luna.
Sin embargo, los inventores consiguieron varios éxitos como el peso y tamaño del aparato, así como un mejor uso del combustible, lo que será ejemplo para NASA y también para SpaceX.
