Hollande preside una nueva reunión de crisis tras el atentado en una iglesia
EFE
El presidente francés, François Hollande, preside esta mañana una nueva reunión de crisis con los ministros y responsables de seguridad y defensa, inmediatamente después de recibir a los responsables de las principales religiones del país, un día después del atentado yihadista contra una iglesia.
Los representantes religiosos fueron recibidos en el Palacio del Elíseo hacia las 08.00 locales (06.00 GMT) por Hollande, en lo que pretendía ser un signo de unidad después del ataque contra la iglesia de Saint-Étienne du Rouvray, en el que un cura de 86 años fue degollado y un fiel octogenario resultó herido de gravedad por dos terroristas que fueron abatidos por la policía.
A las 08.30 (06.30 GMT), el jefe del Estado tiene programado un consejo restringido de seguridad y defensa con los ministros con competencias en esos ámbitos, así como con los responsables de la Policía, de la Gendarmería o de los servicios secretos.
Hollande, en una primera reacción a esta nueva acción yihadista ya dijo que Francia se ha dotado de un arsenal legal adecuado para la lucha antiterrorista y que su Gobierno las aplicará «con la más extrema firmeza».
Pero frente a las crecientes críticas de la derecha y la extrema derecha por inacción y ante las demandas para endurecer el dispositivo, avisó de que «restringir nuestras libertades, derogar las reglas constitucionales, no aportaría eficacia en la lucha contra el terrorismo y debilitaría la cohesión tan preciosa de nuestra nación».
En una línea similar, el ministro de Interior, Bernard Cazeneuve, hizo un llamamiento hoy contra el «populismo» y en una entrevista a la emisora «Europe 1» replicó al jefe de la oposición y expresidente, Nicolas Sarkozy, que ayer reclamó un cambio en profundidad en la política antiterrorista y dijo que había que ser implacables y dejarse de «argucias legales».
«El respeto de la Constitución no es una argucia jurídica, es una obligación», subrayó Cazeneuve.
El titular de Interior dio algunos detalles sobre la marcha de la investigación, como que «no hay vínculos» entre el menor que ayer fue detenido tras el atentado de Saint-Étienne du Rouvray y esos hechos, aunque insistió en que hay que ser muy prudente.
Contra ese joven de 17 años de origen argelino se había dictado una orden administrativa para restringir sus movimientos.
Sarkozy, en una entrevista publicada hoy por «Le Monde» se reafirmó en sus posiciones para exigir que hay que «cambiar de dimensión en nuestra respuesta al terrorismo islamista. No puedo aceptar la aplicación de los esquemas intelectuales del pasado a la realidad de hoy».
En concreto, preconizó que todos los que hayan a luchar con grupos yihadistas o lo hayan intentado tienen que ir a prisión y luego a centros para su desradicalización, pero también la retención administrativa para «los individuos más peligrosos» de entre los fichados por los servicios secretos por su vinculación con el terrorismo.