“Hay familiares involucrados en el secuestro y muerte de mi madre, hermano y un amigo”

Agencias

A casi 14 años, que se cumplirán el próximo 3 de diciembre, de uno de los casos más emblemáticos en el Táchira que involucran el secuestro y asesinato de tres personas en el Páramo de Guarín, municipio Andrés Bello, uno de los deudos que ha sido más implacable tanto en buscar la verdad como en el exigir justicia durante más de una década, revela que supuestamente hay familiares implicados en el abominable suceso.

“Lo que quiero informar es que a mediados del mes pasado tuve una reunión con el ciudadano nuevo Fiscal Superior del Táchira, a quien le planteé el caso de mi familia, que cumplirán 14 años de haber sido secuestrados. En esa reunión él me manifestó que ese era un problema muy grave, pero que era un problema que debía resolver yo, nosotros mismos, me capoteó… Pero necesitaba hablar con él porque la Fiscalía y los cuerpos de seguridad, en este caso los de Inteligencia, el caso nuestro lo han engavetado. Eso me ha llevado a que sea yo quien haya ido investigando lo que pasó, recolectando información y atando cabos de una parte y otra, y me he encontrado con la sorpresa de que hay integrantes de mi familia involucrados en el triple secuestro y asesinato. En este momento no voy a mencionar los nombres pero son familiares muy cercanos a mi entorno”, aseguró Pabón.

“Ellos se encuentran involucrados; ¿en qué forma? Ellos estuvieron haciendo un trabajo de inteligencia dentro del escenario familiar, desde hace mucho tiempo; ellos pagaron y facilitaron información al grupo militar que los secuestró, el GAES, para irse deshaciendo poco a poco de la familia, todo por dinero. Por eso quiero que se nombre una comisión de alto nivel de Inteligencia porque ya sé que los cadáveres de mi familia están enterrados en el Páramo de Guarín. Ellos (los familiares presuntamente implicados) la única intención que tenían era la de quedarse con los bienes, con las propiedades de mis padres, por eso le dieron información a un grupo de funcionarios del GAES para que se encargara de secuestrarlos, asesinarlos y sepultarlos ahí mismo, en el perímetro de la finca donde fueron raptados. Pero en ese grupo también participaron los familiares que digo”, aseguró.

-Eso fue pago –agregó Pabón al referirse a la supuesta negociación que habrían hecho los familiares con los militares-. Ellos les pagaron, contrataron al GAES, que inicialmente tomó la zona por supuestamente tres ganaderos secuestrados, pero resulta que se maneja información de que esos tres ganaderos supuestamente fueron raptados por el mismo GAES, para así poder poner la zona en caliente y desaparecer a mi familia.

A juicio de Pabón, el caso está prácticamente resuelto: “Solo falta que el Estado venezolano asuma el compromiso de nombrar una comisión de inteligencia, que tomen o agarren a las personas claves, las involucradas, que son miembros de mi familia pero relacionadas directamente con todo eso. Han ido acabando con la familia poco a poco, quitando obstáculos con el transcurrir de los años, para luego tener la posibilidad de comprar las propiedades a muy bajo precio”.

La Nación