Hallan una bóveda y documentos importantes tras allanamiento en casa de Cristina Fernández
El Clarín
Las fuerzas federales y los funcionarios judiciales argentinos que allanaron el sábado la casa de los Kirchner en El Calafate, Santa Cruz, encontraron una bóveda con una puerta metálica reforzada.
Si bien hasta el momento no se había encontrado dinero en efectivo, sí se halló un material extraordinario en ese habitáculo ubicado debajo de una escalera. Allí había pendrives y carpetas con información de inteligencia; folios con datos, direcciones y otros detalles (que no trascendieron) sobre, nada más ni nada menos, el juez que investiga el caso cuadernos K y que procesó y elevó a juicio oral otros expedientes contra la ex presidenta Cristina Kirchner: Claudio Bonadio.
En la bóveda había, además de información privada sobre otros dirigentes, un “carpetazo” sobre la ex esposa y madre de las hijas de Alberto Nisman, Sandra Arroyo Salgado.
Según las fuentes consultadas, la puerta para acceder a la bóveda era muy pesada, de metal.
El Clarín está en condiciones de afirmar que esa puerta no es la que tenía originalmente la casa cuando se construyó. Fue cambiada por otra mucho más resistente por pedido de los propietarios de la casa para resguardar objetos que debían estar bien guardados.
Los especialistas que trabajaron en este allanamiento notaron además que las paredes que rodean a esa bóveda, de 2,8 metros de ancho, 1,8 metros de profundidad, y 2,20 metros de alto, eran, al menos hasta anoche, irrompible.
Dentro de la bóveda calafateña había estantes. Allí estaban los folios sobre Bonadio y Arroyo Salgado y también se habrían encontraron pendrives con información que comenzaron a analizar los especialistas.
Ninguno de los investigadores del caso de los cuadernos había imaginado que elementos de este estilo podían estar en ese casa patagónica. Es un descubrimiento sorpresivo y de consecuencias y alcances aun imposibles de establecer.