Encuentran extraños huecos en el fondo marino
agencias
Un grupo de científicos del buque Okeanos Explorer de la Administración Nacional Océanica y Atmosférica de Estados Unidos descubrió una serie de misteriosos agujeros «perfectamente alineados» en el fondo marino a unos 2,6 kilómetros bajo la superficie del océano, y no tienen ni idea de quién o qué los hizo.
Los extraños agujeros fueron descubiertos por la tripulación del buque mientras investigaba la Dorsal del Atlántico Medio, una región del fondo marino casi inexplorada que forma parte de la mayor cordillera del mundo.
Los agujeros forman una línea recta y aparecen a distancias que se repiten regularmente, y están rodeados de pequeños montículos de sedimentos.
Los misteriosos huecos en el fondo del océano Atlántico
No es la primera vez que se detectan agujeros en la zona; dos científicos marinos del Servicio Nacional de Pesca Marítima de Estados Unidos. también detectaron misteriosos huecos en el fondo marino durante una inmersión en 2004.
»El origen de estos agujeros sigue siendo un misterio», escribieron los investigadores de la NOAA en Facebook. «Aunque parecen casi hechos por humanos, los pequeños montones de sedimentos alrededor de los agujeros hacen que parezca que fueron excavados por… algo».
En 2004, los científicos propusieron que los agujeros habían sido hechos por un organismo que vivía en el sedimento del fondo marino o lo escudriñaba, pero como nadie ha visto a esas criaturas hacerlos, se desconoce su origen exacto.
Las especulaciones del público en la página de Facebook de la NOAA han sido muy variadas: desde grietas en la superficie del fondo hechas por un escape de gas, pasando por embarcaciones humanas Subacuáticas que excavan en busca de un tesoro, hasta hormigas.
Incluso se barajó la posibilidad de que sean elaboraciones extraterrestres e incluso se propuso que podían ser estrellas de mar dando volteretas.
La hipótesis de la Atlántida que podría explicar los huecos del fondo marino
El misterio no resuelto recuerda al «camino de baldosas amarillas» de la Atlántida que los exploradores oceánicos descubrieron en mayo pasado, en la cima de una montaña submarina cerca de Hawai.
Los científicos explicaron aquel descubrimiento: sospechaban que el calentamiento y el enfriamiento del fondo marino a lo largo de múltiples erupciones volcánicas habían creado el extraño camino.
En cambio, lo que está creando los agujeros puede tardar un poco más en descubrirse. Los investigadores seguirán explorando la región hasta septiembre, en el marco de la expedición Voyage to the Ridge 2022, cuyo objetivo es cartografiar los arrecifes de coral y los hábitats de las esponjas de la región.
El objetivo es recopilar información de referencia sobre áreas de aguas profundas inexploradas y poco conocidas de la Zona de Fractura Charlie-Gibbs, la Dorsal del Atlántico Medio y la Meseta de las Azores.
Además de estudiar los respiraderos hidrotermales de la zona y sus zonas de fractura y fisura. Si tienen suerte, podrían atrapar al creador de agujeros en el acto. Y develar uno de los tantos misterios del fondo marino.
Por Clarín