Hairskincare: la tendencia para mantener tu cabello sano
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El cuidado de la piel comprende el cuerpo, la cara y el cuero cabelludo. A veces, relegamos las atenciones que necesita la dermis pilosa, confiando en que un champú y un acondicionador realizarán todo el trabajo. Pero hace falta más que la aplicación de limpiadores y de esto va el hairskincare.
La tendencia habla de cuidar la piel. Exfoliar, hidratar y otros tratamientos favorecen la salud del pelo. Los efectos positivos parten del esmero con que mimas el cuero cabelludo, ya que a través de este le aportas vitaminas y nutrientes.
¿Qué es el «hairskincare» y cuáles son sus beneficios?
El hairskincare es traducido como «cuidado de la piel del cabello». Consiste en la ejecución de rutinas saludables para la fibra capilar y el cuero cabelludo; quiere decir que ciertas prácticas logran una melena radiante, hidratada y con movimiento.
El proceso inicia mimando la piel que recubre la cabeza, en ocasiones debilitada por cosméticos inadecuados, el calor, la contaminación y la alimentación carente de minerales y de vitaminas. Las consecuencias reflejan hebras frágiles, resequedad y pérdida de densidad.
La revista Actualidad Sanitaria acota que el bienestar del cuero cabelludo incide directamente en la salud de todo el cabello. La publicación añade que muchos problemas capilares suelen resolverse modificando rutinas.
Es precisamente lo que propone el «cuidado de la piel del cabello», con sustancias y métodos que ofrecen varios beneficios:
- Limpian el tallo.
- Evitan la caída del pelo.
- Regulan el exceso de grasa.
- Fortalecen e iluminan el cabello.
- Previenen el acumulamiento de células muertas.
- Ayudan al funcionamiento correcto del cuero cabelludo.
Las prácticas vinculadas al cuidado de la piel capilar son simples. La mayoría se pueden ejecutar en casa.
Analizar el tipo de cabello
El principal consejo para obtener buenos resultados es conocer el tipo de pelo y de cuero cabelludo. Sabiendo si la piel es seca, grasa o mixta, le proporcionas cosméticos con los ingredientes pertinentes.
La selección incorrecta de productos podría provocar reacciones como dermatitis o descamación. Además, las melenas rizadas, lacias u onduladas evidencian mejor aspecto cuando las atiendes con fórmulas pensadas para cada característica.
Usar mascarillas purificantes
Antes del champú, es recomendable suministrar una mascarilla purificante. Estos sueros colaboran con la higiene y alistan el pelo para que reciban vitaminas y nutrientes.
Adecuar el lavado
Una técnica de lavado llevada a cabo de manera acertada contribuye con la circulación sanguínea y permite la nutrición capilar. Frota con las yemas de los dedos el cuero cabelludo; rascar con las uñas agrieta los folículos, aumentando el peligro de quiebre.
Deja que el champú actúe por lo menos 2 minutos y procede a aclarar. Usa agua tibia cuando el limpiador sea parte de un tratamiento especializado.
Saber peinar el pelo
Los peines de dientes abiertos son ideales para desenredar sin arrancar cabellos. Al peinar, nunca lo hagas desde la raíz; aborda primero de medios a puntas y después pasa a la base.
Evitar el calor extremo
El mejor modo de secar el cabello es dejándolo al aire natural. La utilización frecuente de secadoras y planchas daña el pelo. Cuando expongas la melena a aparatos de calor, lo oportuno es regular la temperatura y rociar antes un protector térmico.
Regular el corte
Además de refrescar el look, un corte de cabello cada 3 meses es aconsejable para que crezca saludable. Recortar es una medida preventiva ante la posible caída; elimina las puntas abiertas y facilita el peinado.
Tratamientos profundos
El peeling dejó de ser un tratamiento exclusivo para el rostro; ahora forma parte del hairskincare. El objetivo es desintoxicar y restaurar el cuero cabelludo con sustancias que tienen la capacidad de eliminar por completo las impurezas, revitalizar la piel del pelo y fomentar la absorción de antioxidantes.
Otras técnicas, como las ampollas de plasma rico en plaquetas o la mesoterapia capilar, promueven el crecimiento del pelo y coadyuvan a la diferenciación folicular; algo indispensable para que algunos tipos de alopecia no afecten folículos sanos. Por lo general, estos métodos exfolian, succionan impurezas, inoculan sueros reconstituyentes y masajean el cuero cabelludo.
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