Guardia costera de EEUU sale a las Bahamas a brindar ayuda
EFE
Una tripulación de 24 miembros de la Guardia Costera estadounidense, con sede en San Juan, partió este miércoles hacia la isla de Andros, en Bahamas, para ayudar al archipiélago atlántico, golpeado por el huracán Dorian.
Según explicó a Efe el portavoz del sector de San Juan de la Guardia Costera estadounidense, Ricardo Castrodad, el grupo de oficiales de la isla reforzará, con embarcaciones, helicópteros y aviones a otros oficiales en las misiones de rescate en Bahamas.
Castrodad indicó que estos esfuerzos de rescate se harán en apoyo al Gobierno y a la Real Fuerza de Defensa de Bahamas por la buena relación que tiene la Guardia Costera con las fuerzas de seguridad bahameña.
Se trata del primer equipo de rescate de la Guardia Costera que sale desde la isla para trabajar en los esfuerzos de asistencia.
Castrodad agregó que en los próximos días será activada otra de las embarcaciones asignadas a San Juan.
Por su parte, el teniente Joel Wyman, comandante del navío «Winslow Griesser», dijo a medios locales que en su camino a Bahamas se detendrán en otro puerto para recoger más suministros y se movilizarán adonde están llevando los recursos que están saliendo de Florida.
Antes de zarpar, la tripulación cargó en el navío decenas de cajas de agua embotellada, latas de comida y bolsas de arroz y harina, además de artículos de aseo personal, entre otros artículos de primera necesidad.
De igual manera, Castrodad dijo que otras tripulaciones de la Guardia Costera en Cayo Hueso, Miami y Jacksonville -todos en Florida (EE.UU.) y miembros del séptimo distrito de la agencia-, ya se encuentran en Bahamas aportando en la misión de rescate.
Todos estos equipos, a su vez, ayudarán a restablecer la zona portuaria de Bahamas para reforzar las actividades comerciales en el área, añadió Castrodad.
Según la página web de la Guardia Costera, las fuerzas de seguridad de la agencia ya ha rescatado a 61 personas y cuatro animales desde el paso del huracán Dorian.
Dorian comenzó este martes a abandonar el noroeste de Bahamas, donde más de 60.000 personas necesitan ayuda humanitaria tras la que ya se considera la peor catástrofe en la historia del archipiélago, cuyo Gobierno mantiene 7 muertes, cifra provisional que reconoce aumentará.
El grado de la tragedia sin precedentes de la que hablaba el primer ministro de Bahamas, Hubert Minnis, va conociéndose según pasan las horas, aunque es una incógnita la cifra de muertes.
Minnis dijo que lamentablemente la cifra aumentará y que hay heridos graves entre los más de una veintena de las Islas Ábaco que fueron llevados a Nueva Providencia, donde se encuentra la capital, Nassau.
El primer ministro resaltó que las Ábaco están completamente inundadas, incluido su aeropuerto.