Guaidó y Maduro condenan los atentados en Sri Lanka y expresan solidaridad - 800Noticias
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EFE

Nicolás Maduro, y el jefe del Parlamento, Juan Guaidó, reconocido como presidente interino por más de cincuenta países, condenaron este domingo los atentados en las iglesias y hoteles de Sri Lanka que han dejado más de 200 muertos y expresaron su solidaridad.

«Lamento profundamente la ola de atentados terroristas que han ocasionado muerte y sufrimiento en Sri Lanka. Los venezolanos rechazamos con firmeza estos crímenes contra la humanidad y abogamos por la construcción de un mundo libre de odio y de violencia. ¡No más Terrorismo!», dijo en Twitter Maduro.

Asimismo, en un comunicado la Cancillería venezolana expresó su repudio contra el «terrorismo en cualquiera de sus formas y manifestaciones» y manifestó «sus más sentidas condolencias al pueblo y autoridades de Sri Lanka, especialmente a los familiares y allegados de las víctimas de este acto de barbarie».

Por su parte, Guaidó, que fue proclamado como presidente encargado de Venezuela en enero pasado al considerar ilegítimo a Maduro por ganar unas elecciones tachas de fraudulentas, indicó también en Twitter que lamentaba «los despreciables hechos terroristas ocurridos en Sri Lanka que dejaron innumerables víctimas inocentes».

«Expresamos nuestras más sentidas palabras de condolencia y reivindicamos el derecho de todo ser humano a profesar libremente su religión», agregó el líder opositor.

Sri Lanka vivió hoy un sangriento Domingo de Resurrección con más de 200 muertos, entre ellos una treintena de extranjeros, y 450 heridos, tras una serie de atentados que golpearon tres iglesias en las que los fieles celebraban la festividad cristiana, cuatro hoteles y un complejo residencial.

Las seis primeras explosiones ocurrieron de forma simultánea hacia las 08.45 horas (02.45 GMT) en tres hoteles de lujo en Colombo y también en una iglesia de la capital, otra en Katana, en el oeste del país, y la tercera en la oriental ciudad de Batticaloa.

Horas después, una séptima detonación tuvo lugar en un pequeño hotel situado a unos cien metros del zoo de Dehiwala, a una decena de kilómetros al sur de la capital, y la última en un complejo residencial en Dematagoda, también en Colombo.

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