Gobierno colombiano y FARC trazan plan conjunto para agilizar implementación de la paz
EFE
El Gobierno colombiano y las FARC anunciaron hoy en la caribeña Cartagena de Indias una estrategia basada en seis puntos para agilizar la implementación del acuerdo de paz firmado el pasado 24 de noviembre.
La determinación fue anunciada en un comunicado conjunto del Gobierno y las FARC luego de dos días de reuniones a puerta cerrada de la Comisión de Seguimiento, Impulso y Verificación a la Implementación (Csivi) del acuerdo de paz, de la que hicieron parte altos funcionarios y jefes de la guerrilla.
Antes del comunicado, el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, informó en su cuenta de Twitter que en la cita «se revisaron avances en calendario de desarme, ZVTN (zonas veredales transitorias de normalización), reincorporación y asuntos normativos».
Según el comunicado, luego del trabajo realizado se identificaron las dificultades y se acordó trabar en el desarrollo legislativo, garantías de seguridad, tránsito a la legalidad, zonas veredales transitorias de normalización, reincorporación y el cronograma de la dejación de armas.
Con respecto del desarrollo legislativo, se acordó que en abril el Gobierno presentará al Congreso un paquete de proyectos de reforma constitucional y de ley para desarrollar el tema de tierras, la creación de la Comisión de la Verdad y de la Unidad de Búsqueda de Personas Desaparecidas.
En lo referente a las garantías de seguridad, se diseñará y se pondrá en marcha «el Pacto Político Nacional», que busca «garantizar el efectivo compromiso de todos los colombianos para que nunca más se utilicen las armas para hacer política».
De otro lado, las FARC completarán «en los próximos días» los listados de sus hombres, que deben incluir a los milicianos, mientras que el Gobierno se comprometió a dar «apoyo necesario a las instancias competentes encargadas del trámite de amnistías con el fin de agilizarlas».
El Ejecutivo también se comprometió a que en abril entregará «en su totalidad» la infraestructura de las zonas veredales creadas para albergar a unos 7.000 guerrilleros que deben ser dotadas de ambulancias y personal médico.
Para lo relacionado con la reincorporación, se revisaron los programas educativos del Gobierno para los guerrilleros «con el fin de brindar seguridad socioeconómica, una vez termine su tránsito a la legalidad».
Como parte del compromiso para acelerar el desarme, se definió que se continuará con la dejación de las armas de los miembros de las FARC que hacen parte del Mecanismo de Monitoreo y Verificación, y de las que participan en el desminado humanitario y en sustitución voluntaria de cultivos ilícitos.
«El Gobierno Nacional y las FARC- EP seguirán trabajando para cumplir los compromisos contemplados en el Acuerdo Final que nos llevará a construir la paz estable y duradera para beneficio de todas y todos los colombianos», finaliza el documento. EFE