Gobierno colombiano asegura que Defendamos la Paz «falta a la verdad»
EFE
El Gobierno colombiano aseguró este martes que el movimiento Defendamos la Paz, creado por líderes de diversas orillas políticas para respaldar el acuerdo firmado con las FARC, falta a la verdad al criticar la posición oficial sobre la implementación de lo pactado y afirmar que hay «hostilidad» hacia Cuba.
«El movimiento Defendamos la Paz falta a la verdad cuando hace afirmaciones acerca de la existencia de posiciones del Gobierno pro-paz afuera para conseguir recursos y anti-paz adentro, para desmontar el grueso del acuerdo», indicó la Cancillería en un comunicado.
Según el Ministerio de Relaciones Exteriores, la posición del Gobierno y de todos los voceros «es la contenida en la política de Paz con Legalidad, bajo el liderazgo del presidente de la República».
Defendamos la Paz rechazó ayer la supuesta «hostilidad» del Gobierno colombiano hacia Cuba, país garante del proceso de paz con las FARC, al insistir en que entregue a los negociadores del ELN que están en la isla.
La organización consideró que «la exigencia de entrega de los comandantes del ELN (Ejército de Liberación Nacional) en La Habana, en violación de un protocolo firmado por el Estado colombiano, se usó para socavar el papel de Cuba en el proceso de paz con las FARC».
Manifestó igualmente que «el Gobierno va ahora por más y parece inclinado hacia la ruptura de relaciones diplomáticas».
Agregó que la misión diplomática de Noruega, el otro país garante del proceso, ha sido «excluida» de encuentros y visitas de importancia para la implementación del acuerdo de paz firmado en 2016.
Asimismo, señaló que la participación de notables como el expresidente español Felipe González y el uruguayo José Mujica «ha quedado paralizada», y que el Gobierno está renuente a extender el mandato en el país de la Oficina de la Alta Comisionada de Derechos Humanos de la ONU, «encargada de la verificación de la situación de derechos humanos en el marco del acuerdo de paz».
Para la Cancillería, dichos argumentos están fundados en «aseveraciones que no se compadecen con la verdad» y desconocen «hechos notorios».
Asimismo, el Gobierno sostuvo que la Comisión de Seguimiento, Impulso y Verificación a la Implementación (CSIVI) «no ha perdido relevancia», ya que se ha reunido en 17 ocasiones desde el 7 de agosto de 2018.
«Frente a los actores internacionales comprometidos en este proceso, es falso que haya hostilidad, marginación o distanciamiento», sostuvo la Cancillería.
Lo anterior lo sustentó aseverando que «el Gobierno ha dado todas las garantías para que la Misión de Verificación y el Representante Especial del Secretario General de las Naciones Unidas cumplan con su mandato de seguimiento a la implementación del acuerdo».
A juicio del ministerio, «quienes hacen parte del movimiento Defendamos la Paz también deben informarse mejor en lo que corresponde a la presencia de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Colombia».
El ELN inició en febrero de 2017 en Quito unas negociaciones de paz con el anterior Gobierno colombiano que en mayo de 2018 fueron trasladadas a La Habana.
Al asumir el cargo, el 7 de agosto de 2018, el presidente Duque condicionó la continuidad de las conversaciones a que ese grupo deje de secuestrar y libere a las personas que tiene en su poder, en lo que no se han conseguido avances.
Además, luego del ataque terrorista del pasado 17 de enero contra una escuela de cadetes de la Policía en Bogotá, en el que murieron 22 policías, los diálogos quedaron en punto muerto y Duque pidió a Cuba que entregue a los delegados del ELN que se encuentran en La Habana para los diálogos, petición que no ha sido atendida por el Gobierno de la isla.