Francisco «Libertad » Miranda, el más universal de los venezolanos
Por: Eumenes Fuguet Borregales
Nació el 28 de marzo de 1750. Con su verbo, pluma y espada, recorrió el mundo, insuflando ideas de lucha redentora.
Es el primer general en jefe de la Venezuela Heroica. Único militar en el mundo, que ha participado en tres continentes y en tres revoluciones.
Único americano cuyo nombre está inscrito en el Arco de Triunfo de Paris. Su egregia presencia en Bronce engalana Valmy con la inscripción:» General Miranda Libertador de Francia».
Su retrato de porte distinguido en la galería de héroes en el Museo de Versalles. Es Pionero del Derecho al Voto de la Mujer, propuesto ante la Convención de París en 1792.
Precursor de nuestra Reforma Agraria, al diseñar en 1808, un modelo de Constitución. donde estableció la entrega de tierras a los indígenas.
Pionero en la concesión de Condecoraciones. Poliglota, escritor. Intentó traer la primera imprenta.
Visualizó en el siglo XVII el Canal de Panamá, con esa misma visión futurista, preparó grandes escenarios, para promover y lograr una gran nación denominada » Colombeia», de esas ideas, surgió la República de Colombia, (mal conocida como Gran Colombia).
Diseñó la gloriosa Bandera Nacional.
Fundó en diciembre de 1810 la «Sociedad Patriotica», el primer Partido Político de Venezuela.
El 10 de abril de 1812, ante la inminente llegada del jefe realista Domingo Monteverde, recibió el Título de «Generalísimo».
La biblioteca en su residencia londinense, de la más completa de Europa. Compositor de obras musicales en piano y flauta.
Visitó muchos palacios, tambien prisiones.Recibió esmerada formacion en la Real y Pontificia Universidad de Caracas.
Socialmente, por ser hijo de canario, denominado «Blanco de Orilla», estaba en desventaja ante los Blancos Peninsulares y los Blancos Criollos.Por tal motivo, a los Veintiún años se trasladó a España, donde compró el grado de capitán por 85.000 reales de vellón.
Napoleón Bonaparte expresó:»Miranda lleva el fuego sagrado en el alma».
Falleció en la prisión de las Cuatro Torres de Cádiz el 14 de julio de 1816, convirtiéndose en: «El caballero andante de la libertad»
La historia imparcial y sin apasionamientos, registra en sus páginas una gran verdad: «No tiene mancha el nombre de Miranda».
