Francia cierra playas y parques ante escaso cumplimiento de la cuarentena - 800Noticias
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EFE

Las autoridades francesas han decidido el cierre de todas las playas del Mediterráneo, de Bretaña o del departamento de Gironde, y amenazan con hacer lo mismo con los bosques y otros espacios abiertos en París al constatar un escaso respeto del confinamiento contra el coronavirus.

La alcaldesa de París, Anne Hidalgo, y el prefecto de policía, Didier Lallement, hicieron este jueves «un llamamiento solemne» para que se limiten los desplazamientos «a lo estrictamente necesario» porque «continúan algunos comportamientos inaceptables» en áreas como el Campo de Marte, la explanada de los Inválidos o los bosques de Vincennes y de Boulogne, donde sigue habiendo mucha gente.

Después de haber cerrado desde el lunes todos los parques y jardines de la capital, Hidalgo y Lallement pidieron «civismo» y avisaron, en un comunicado, de que habrá «controles estrictos» y se prohibirá el acceso a los lugares con más público.

Entre ellos, la basílica del Sacré Coeur, uno de los más visitados de la ciudad y cuyo rector, Jean Laverton, anunció hoy que por primera vez desde que finalizó su construcción en 1914 va a cerrar sus puertas para respetar las consignas gubernamentales.

La concejal responsable de seguridad, Colombe Brossel, señaló en el canal «BFMTV» que la autorización para hacer deporte en el exterior individualmente no es «para correr 15 kilómetros» y hay que hacerlo en el entorno inmediato del domicilio.

Los prefectos de todas las regiones de la fachada mediterránea, incluida la isla de Córcega, también decidieron el cierre de las playas, al igual que se había anunciado en Bretaña.

El delegado de Gobierno de Provenza Alpes Costa Azul, Pierre Dartout, lo justificó porque había demasiada gente y porque se había observado que se formaban grupos que se quedaban durante horas.

En Gironde, en el oeste del país, además de prohibir el acceso a las playas, el Ayuntamiento de Burdeos y la prefectura dictaron también un decreto para impedir la circulación de peatones por los muelles del río Garona.

Las reglas de confinamiento en Francia incluyen algunas derogaciones para quienes tienen que ir a trabajar, comprar provisiones básicas, sobre todo alimentos o medicamentos, para citas médicas, por motivos familiares imperiosos o para hacer deporte.

En todos los casos, es obligatorio llevar un certificado encima y quien incumpla las reglas se expone a una multa de 135 euros. En los dos primeros días de aplicación, se hicieron 70.000 controles y se impusieron 4.095 multas.

Para el ministro del Interior, Christophe Castaner, quien se salte esas reglas es un «imbécil» y, sobre todo, «una amenaza para sí mismo».

En Francia hay 9.134 casos declarados de coronavirus y 264 muertos, de acuerdo con el recuento del Ministerio de Sanidad. EFE

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