+FOTOS | Unicef envía máscaras y trajes de protección a China por el coronavirus
EFE
El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) ha enviado a los trabajadores sanitarios en China seis toneladas de máscaras respiratorias y trajes de protección en respuesta al brote de coronavirus, que ha dejado ya al menos 132 muertos y 5.974 casos confirmados.
Los suministros se enviaron desde el centro mundial de suministros de Unicef en Copenhague (Dinamarca) para ser distribuidos en Wuhan, epicentro del virus, y se enviarán más artículos en los próximos días, de acuerdo con un comunicado de la organización.
«Este coronavirus se está propagando a una velocidad vertiginosa y es importante poner todos los recursos necesarios para detenerlo», indicó Henrietta Fore, directora ejecutiva de Unicef.
«Es posible que no sepamos lo suficiente sobre el impacto del virus en los niños o cuántos pueden verse afectados, pero sí sabemos que la vigilancia y la prevención cercanas son fundamentales. El tiempo no está de nuestra parte», agregó.
La organización indicó, además, que mantiene un estrecho contacto con las autoridades chinas, incluidos el Ministerio de Comercio y la Comisión Nacional de Salud, la Organización Mundial de la Salud (OMS) y otras agencias de Naciones Unidas para vigilar los desarrollos y las necesidades a medida que la situación avance.
Unicef también está trabajando con la OMS y sus socios para una respuesta multisectorial coordinada en China y otros países afectados.
La epidemia del coronavirus ha obligado a que fueran canceladas las pruebas de la Copa del Mundo de esquí alpino previstas para el 15 y 16 de febrero en China, según informó hoy la Federación Internacional (FIS).
Esta carrera iba a ser el primer ensayo para China antes de los Juegos Olímpicos de invierno de 2022 en Pekín.
El brote de neumonía causada por un nuevo coronavirus en China ha dejado ya al menos 132 muertos y 5.974 casos confirmados, cifra esta última que supera ya a la registrada en el gigante asiático entre noviembre de 2002 y julio de 2003 durante la grave epidemia del síndrome respiratorio agudo y grave (SARS).
El presidente de China, Xi Jinping, aseguró anoche que el coronavirus es «un demonio» y que las autoridades «no dejarán que se esconda» durante una reunión con el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus.