+FOTOS | Continúan las detenciones en protestas de estudiantes en Tailandia
EFE
La Policía de Tailandia detuvo este jueves en Bangkok a otros dos jóvenes activistas por su participación en el movimiento estudiantil de protesta que demanda reformas democráticas y la reducción del poder del estamento militar y de la monarquía.
Los detenidos son Tattep Ruangprapaikitseree, secretario de la organización «Free People» -que convocó la manifestación más multitudinaria del movimiento hasta el momento, celebrada el pasado 16 de agosto y en la que participaron al menos 10.000 personas-, y el activista Panumas Singprom.
Los dos activistas, que retransmitieron en directo su detención en las redes sociales, se enfrentan a las acusaciones de haber violado el decreto de estado de emergencia impuesto por el Gobierno para combatir la pandemia y del delito de sedición, entre otras, que podrían conllevar penas de hasta siete años de cárcel.
Otros 11 organizadores de las protestas casi diarias han sido detenidos desde el pasado 7 de agosto y se enfrentan a los mismos cargos, aunque todos ellos han sido puestos en libertad bajo fianza.
Los activistas han denunciado que la Policía emitió a finales de julio una orden de detención contra 31 organizadores de las protestas, que comenzaron el pasado 18 del mes pasado.
«No tengo miedo de ser arrestado, a pesar de que yo era una de las 31 personas nombradas en la orden de arresto. Pero lo que me preocupa es que si todos somos arrestados, los movimientos políticos en Tailandia no tendrán ningún progreso», explicó a Efe Tattep Ruangprapaikitseree poco antes de la protesta que contribuyó a organizar el pasado 16 agosto.
Los dos detenidos hoy se hicieron famosos en Tailandia en diciembre del año pasado cuando se besaron dentro del Parlamento en señal de apoyo de una proposición de ley para legalizar el matrimonio homosexual que fue finalmente fue rechazada.
El movimiento estudiantil reclama que se limite el poder de los militares, que han tomado el poder en 13 golpes de Estado desde la abolición de la monarquía absoluta en 1932, y de la monarquía, protegida por una estricta ley de lesa majestad que prescribe penas de hasta 15 años de cárcel para quien insulte a la institución.
Las protestas también se dirigen contra el primer ministro, Prayut Chan-ocha, que encabezó el golpe militar de 2014 y que fue elegido jefe del Gobierno en unas elecciones en 2019 que han sido calificadas de poco transparentes.