Filipinas refuerza su seguridad tras el atentado con 14 muertos en Davao
EFE
Las Fuerzas Armadas de Filipinas intensificaron las medidas de seguridad en la ciudad sureña de Davao, que el pasado viernes fue escenario de un atentado con bomba en el que fallecieron 14 personas y otras 67 resultaron heridas, informaron hoy los medios locales.
«Las Fuerzas de Davao han incrementado sus patrullas a pie. También hemos fortalecido la presencia de nuestro personal militar e intensificado los controles en las carreteras para prevenir acciones de los responsables», afirmó el portavoz de las Fuerzas Armadas de Filipinas, Edgard Arevalo, según la emisora filipina GMA.
La Policía de la Región Capitalina de Filipinas (NCRPO, por sus siglas en inglés), aseguró que sus efectivos en Manila siguen entretanto en alerta máxima para evitar que se produzca un ataque similar en la capital, donde residen al menos 12 millones de personas.
El director del NCRPO, Oscar Albayalde, apuntó que los residentes de Manila verán una mayor presencia de policías, especialmente en los lugares más concurridos de la metrópolis.
«En algunas zonas aun no hemos podido desplegar efectivos de las unidades especiales», afirmó hoy Abayalde, que concretó que han llamado a filas a todos los policías, incluyendo a aquellos que se encuentran de vacaciones.
Desde que se produjera el atentado el pasado viernes, las autoridades de Filipinas han reforzado además la vigilancia en aeropuertos, puertos marítimos, terminales de autobuses y centros comerciales, y han incrementado los controles de carreteras, especialmente en Davao.
Aunque la Policía de Filipinas afirma que aun está investigando la autoría del atentado, el grupo islamista Abu Sayyaf se ha responsabilizado del ataque de Davao, ciudad de la que el presidente filipino, Rodrigo Duterte, ha sido alcalde durante más de 20 años.
El atentado ocurrió pocos días después de que el Gobierno intensificara la ofensiva lanzada contra Abu Sayyaf tras la muerte de 15 soldados y 30 rebeldes en enfrentamientos en la ciudad de Patikul, en la isla de Joló (sur).
Un puñado de excombatientes de la guerra de Afganistán contra la Unión Soviética comandados por Abdulrajik Abubakar Janjalani (1959-98) fundó Abu Sayyaf en 1991 en la isla de Basilan, vecina a Joló y a casi 400 kilómetros al oeste de Davao.
Esta banda, que se ha declarado seguidora del grupo terrorista Estado Islámico, ha protagonizado algunos de los ataques terroristas más sangrientos del país y secuestros notorios, como los de los canadienses John Ridsdel y Robert Hall, a quienes decapitó este año porque no pagaron un rescate millonario.