Figueroa: «La MUD tiene que pedir perdón y revisarse internamente»
El diputado a la Asamblea Nacional (AN), Marcos Figueroa, indicó que no se respetaron los liderazgos regionales por los que pidió revisar las postulaciones de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) en el estado Anzoátegui.
Figueroa criticó a Primero Justicia (PJ) por el «mal manejo» del escenario que se suscitó en Anzoátegui y acusó a la tolda aurinegra de ser parte de la «desviación de los liderazgos naturales» que aseguró se realizan en lo interno de la MUD.
«Yo no recibí ninguna notificación administrativa, en ningún momento fui notificado, sino señalado, acusado y tirado al escarnio público al que me someten hoy», puntualizó.
«Pareciera que hoy la política la están llevando a un intercambio de figuritas», indicó este viernes en una entrevista que concedió al programa Primera Página, transmitido por Globovisión.
El exmilitante de PJ aseveró que las primarias de la oposición que se celebraron en Anzoátegui, específicamente en Guanta fueron a su juicio unas elecciones «operadas, conducidas, manejadas y fueron infiltradas y fueron inflando una candidatura con el Gobierno Nacional».
Manifestó que su candidatura independiente pretende derrotar en el circuito 4 de su estado a Maripili Hernández y a un aspirante de la MUD que fue inflado por el propio Ejecutivo.
Para Figueroa no fueron tomadas en cuenta las denuncias que realizó a lo interno de la tolda aurinegra y se finalizó con su expulsión. Por esa razón, reaccionó ante las declaraciones de los voceros del partido: «Yo creo que quienes tienen que pedir perdón y revisarse internamente es la MUD», respondió a los detractores de su postulación como independiente.
Rechazó que la MUD no tolere las diferencias políticas y no permita que sus miembros expresen su opinión a libre voz, argumento que utilizó para catalogar a la alianza que adversa al Gobierno como el responsable de la polarización. En ese sentido, acotó que su situación no es el único ejemplo, también lo es a su juicio, lo que pasó con María Corina Machado y la pugna de Copei.
