FARC no ha cesado hostilidades contra civiles en Colombia
AFP.- El ministro de Defensa de Colombia, Luis Carlos Villegas, aseguró este sábado que las FARC han cumplido con el cese al fuego unilateral decretado por la guerrilla pero no han cesado las «hostilidades» contra la población civil.
«Si bien las FARC han cumplido con el cese al fuego de una manera aceptable (…) no así han cumplido con el cese de hostilidades contra la población civil: siguen extorsionando, en narcotráfico, en minería criminal, sembrando minas», dijo Villegas en una declaración pública.
El ministro de Defensa salió a responder a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC, comunistas), quienes este sábado advirtieron que la tregua unilateral decretada de su parte desde julio «peligra» por los recientes ataques militares en Colombia.
Esta semana fueron abatidos en combates cuatro guerrilleros de las FARC en Caquetá. Otros dos murieron el jueves, también en combate, en el Meta (sureste), anunció este sábado el ministro.
Según Villegas, estos insurgentes practicaban la extorsión y sembraron minas antipersona.
El ministro afirmó que el compromiso del presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, de no bombardear campamentos de la guerrilla, «se ha cumplido a cabalidad», pero aseguró que la fuerza pública seguirá protegiendo a la población en todo el país.
Santos propuso el pasado miércoles un cese al fuego bilateral y definitivo a partir del 1 de enero de 2016, que incluso admitió podría adelantarse al 16 de diciembre, acogiendo un planteo de las FARC.
Villegas aseguró este sábado que el cese de fuego definitivo «es necesario para terminar con el conflicto colombiano», y que deben negociarse cuanto antes todos los elementos que lo garanticen.
El proceso de paz con las FARC, principal y más antiguo grupo rebelde de Colombia, surgido de una insurrección campesina en 1964, avanza en Cuba desde noviembre de 2012.
El conflicto armado colombiano, en el que han participado guerrillas, paramilitares y agentes del Estado, ha dejado oficialmente unos 220.000 muertos.