Familiares de presos políticos piden en sede de ONU que se cumpla la visita de Bachelet
EFE
Un grupo de familiares de presos políticos y dirigentes opositores pidió este martes ante la sede de las Naciones Unidas en Caracas que se anuncie la fecha en la que la alta comisionada de la ONU para derechos humanos, Michelle Bachelet, visitará Venezuela como estableció el organismo.
El grupo, liderado por el diputado opositor Gilbert Caro y por Lilian Tintori, esposa del dirigente preso Leopoldo López, se apostó por segunda vez en este mes en la entrada de la sede de la ONU en Caracas para exigir esta visita que fue aprobada por el organismo el pasado 27 de septiembre.
Tintori dijo que los encargados del organismo en Venezuela le informaron que se están haciendo los preparativos para que Bachelet «constate en persona las violaciones a los derechos humanos» en el país petrolero.
«Tiene que pasar porque no es una petición de los venezolanos, es una resolución ya dada en el Consejo de los Derechos Humanos, todos estamos dando lo mejor de nosotros para salir de esta dictadura», dijo la opositora a periodistas.
Agregó, asimismo, que a las puertas de las Naciones Unidas el grupo de familiares también exige «la libertad plena de todos los presos políticos».
Sin embargo, señaló: «Sabemos que todos los venezolanos que estamos en Venezuela estamos presos, y por eso ya es un tema internacional, por eso ya es una exigencia ante las Naciones Unidas (…) no nos vamos a mover de la ONU hasta que nos den una respuesta contundente de cuándo es la fecha en la que llegará la alta comisionada».
El diputado Gilbert Caro, que también estuvo preso durante un año y medio pese a ser parlamentario, agregó que en Venezuela falleció el concejal Fernando Albán cuando se encontraba bajo custodia del servicio de inteligencia y que aún «no hay una verificación de lo que allí ocurrió» y «no hay culpables».
Y subrayando este caso, pidió la presencia de Bachelet para constatar no solo las supuestas violaciones de los derechos humanos a los políticos privados de libertad y a sus familiares que viven «con incertidumbre» y «no duermen».
También pidió a la ONU constatar lo que sucede en el país: «Hasta cuándo nuestra gente tiene que sufrir por la gasolina, por la comida, la alimentación, la salud».
