Fallece el cantautor y pintor español Luis Eduardo Aute a los 76 años
EFE
El cantautor, pintor, escultor, poeta y cineasta Luis Eduardo Aute falleció al mediodía de este sábado a los 76 años en el hospital madrileño en el que había ingresado ayer, informaron a EFE fuentes de su entorno familiar, que desconocen si su deceso pudiera estar relacionado con el coronavirus.
El autor de «La Belleza» (Manila, 13 de septiembre de 1943) estaba retirado de los escenarios desde que sufrió un grave infarto el 8 de agosto de 2016 que le mantuvo 48 días en coma.
Tras varias estancias en hospitales, entre ellos uno cubano, Aute permanecía en su casa, cuidado por su familia y este viernes ingresó en un centro sanitario madrileño en el que ha fallecido sobre las 11:30 horas de hoy sábado.
Las mismas fuentes ignoran cuándo y cómo podrá ser su sepelio debido a las restricciones en toda la comunidad de Madrid para la instalación de capillas ardientes, prohibidas independientemente de la causa del fallecimiento a causa de la pandemia de coronavirus.
El cantante había celebrado su medio siglo en los escenarios con un multitudinario recital en diciembre de 2015 en México y con la publicación de un poemario en el que repasaba toda su trayectoria bajo el título «Sexto animal» (Espasa).
Cuando sufrió el accidente vascular, Aute tuvo que anular todos los conciertos que tenía previstos en América Latina, que formaban parte del tour «La Gira Luna» con el que celebraba sus 50 años en la música.
Desde que sufriera el infarto, el músico, del que sus compañeros han destacado siempre su «bondad, humildad y compromiso», fue homenajeado en distintas ocasiones.
El polifacético creador era el autor de canciones como «Al alba», «Rosas en el mar» o «Una de dos», que forman parte del patrimonio de la canción de autor española, en la que destacó junto a figuras como Joan Manuel Serrat, Joaquín Sabina o Paco Ibáñez.
Con motivo de su 75 cumpleaños, colegas como Sabina, Serrat, Ana Belén, Silvio Rodríguez, José Mercé o Miguel Poveda organizaron un concierto que se celebró en diciembre de 2018 en el Wizink Center de Madrid bajo el lema «ánimo, animal».
Veintitrés escritores, entre ellos Fernando Sánchez Dragó, Fernando Marías o Vicente Molina Foix colaboraron en «Giralunas y ficciones para Aute», un «libro tributo» para homenajear a «uno de los últimos genios contemporáneos» que «ha dejado un impresionante legado cultural que siempre servirá de inspiración tanto a generaciones actuales como venideras», decían.
Uno de los homenajes más difundidos fue el que Ángela Molina y el entonces ministro de Cultura, Íñigo Méndez de Vigo, le hicieron con motivo de la entrega a la actriz el Premio Nacional de Cinematografía en 2016 cuando cantaron a dúo los primeros versos de «Más cine por favor».
Nacido en Manila, su familia se trasladó a Madrid cuando él tenía 11 años, y en la capital de España, donde estudió algunos cursos de Arquitectura, vivió siempre.
El fallecido, casado desde 1968 con Marichu Rosado, con la que tenía tres hijos, se inició musicalmente como guitarrista de los grupos «Los Tigres», «Los Pekeniques» y «Los Sonor», hasta que, con 17 años, debutó como cantautor en el programa de Televisión Española (TVE) «Salto a la fama».
Su faceta pictórica, menos conocida, la desarrolló desde muy joven y expuso por primera vez, en la Galería Alcón de Madrid, en 1960.
Autor de una voluminosa producción figurativa, sobre todo pictórica pero también escultórica, sus trabajos han viajado a ferias como la Bienal de París, la de Sao Paulo o ARCO.
Entre 2004 y 2010 realizó una muestra retrospectiva itinerante que bajo el título «Transfiguraciones» llevó su obra por toda España y algunos países de América Latina.
Con 23 años, Aute se decidió a entrar en el estudio de grabación aunque con la condición de no dar conciertos ni hacer promoción, para poder tener tiempo de seguir pintando.
Su primer álbum se tituló «Diálogos de Rodrigo y Jimena» e incluyó canciones como «Rosas en el mar» y «Aleluya nº1», que ya había hecho populares previamente Massiel.
«24 canciones breves» (1968), «Rito» (1973), «Espuma» (1974), «Babel» (1975), «Forgesound» (1976), «Sarcófago» (1977), «Albanta» (1978) y «De par en par» (1979) marcaron una década pero fue «Albalanta», que incluía la célebre «Al alba», la que dio un giro total a su carrera.
El tema, que cantó por primera vez Rosa León, había sido compuesto por Aute inspirado por los últimos fusilamientos franquistas.
En los 80 llegaron trabajos como «Alma» (1980), «Fuga» (1982), «Entre amigos» (1983), «Cuerpo a cuerpo» (1984), «20 canciones de amor y un poema desesperado» (1986) o «Segundos fuera» (1989) y en los 90 «Slowly» (1992), «Mano a mano» (1993) y «Animal Uno» (1995).
En 2003 empezó una nueva grabación de todas sus canciones, de la que se editaron tres volúmenes dobles bajo el título «Autorretratos».
Le siguieron «Memorable cuerpo» (2009), «Intemperie» (2010) y «El niño que miraba el mar» (2012), acompañado de un DVD con la película «El niño y el basilisco».
En cine debutó en París como meritorio del ayudante de dirección de Joseph L. Mankiewicz en «Cleopatra» (1963). Era autor del largometraje animado «Un perro llamado Dolor» y compuso bandas sonoras para Jaime Chávarri, Luis García Berlanga o Fernando Fernán Gómez.
Como poeta publicó «La matemática del espejo» (1975), «Canciones y poemas» (1976), «Liturgia del desorden» (1978), «Canciones» (1980) y «Luis Eduardo Aute, cuerpo del delito» (1999).
En «Cuerpo del delito» (2004), reunió por primera vez las letras de sus 300 composiciones y diez años después lo actualizó en «Claroscuros y otros pentimientos», que reunía 400.