Exilio venezolano elogia decisión de Almagro de activar la Carta Democrática
EFE
Grupos del exilio venezolano de Miami elogiaron este martes la decisión del secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, de activar la Carta Democrática del organismo para ese país suramericano, una muestra, dijeron, de su «compromiso con la libertad».
«Almagro ha demostrado su compromiso con la libertad y la democracia en Venezuela al invocar la activación de la Carta Democrática en un país que viola los derechos humanos y se ha salido del esquema democrático», afirmó a Efe José Antonio Colina, presidente de la organización Venezolanos Perseguidos Políticos en el Exilio (Veppex).
La decisión de Almagro supone un paso sin precedentes, «histórico», que abre un proceso que puede llevar a la suspensión de Venezuela del organismo regional, dijo el líder de este grupo del exilio venezolano de Miami.
En un informe publicado el martes, Almagro recurre al artículo 20 de la Carta para «solicitar la convocatoria de un Consejo Permanente de los Estados miembros entre el 10 y el 20 de junio», un procedimiento que «deberá atender a la alteración del orden constitucional y cómo la misma afecta gravemente el orden democrático» deVenezuela.
Para José Hernández, secretario ejecutivo de la alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) de Miami, esta medida supone varios hitos: en primer lugar, es la primera vez que el secretario general del ente la pide con la Carta Interamericana vigente; después, la solicita un secretario general, Almagro, que es un hombre de izquierdas.
«Es muy importante que la Carta la haya solicitado un hombre de izquierdas como Almagro, una petición nunca antes hecha en la historia de la OEA», dijo a Efe Hernández, quien además, resaltó, se trata de una «demostración de que el Gobierno venezolano es un régimen totalitario».
Hernández apuntó que, no obstante, el Gobierno de Venezuela tiene la oportunidad de «demostrar que esto no es así» y convocar un «referéndum revocatorio, encontrar el mecanismo para que las mayorías populares puedan decidir su destino».
Y es que, exclamó Hernández, el «país no aguanta más la situación. Esto (Venezuela) no es un Gobierno de izquierdas, es un Gobierno totalitario que atropella al pueblo y está aniquilando a la población, con los niños muriéndose en los hospitales».
Dado que «este Gobierno se ha convertido en una amenaza para sus propios ciudadanos dentro del país», este proceso abierto en la OEA «establece de una un vez por todas que en Venezuela no existe democracia», apostilló Colina.
Como consecuencia, a Venezuela «se le aplicarían las sanciones y aislamiento necesario para tratar de impulsar un cambio en un país dominado por una ‘narcodictadura», señaló el presidente de Veppex.
Con ese paso sin precedentes en la OEA se abre un proceso que puede suponer desde resoluciones o gestiones diplomáticas hasta la eventual suspensión de Venezuela como miembro del organismo, para lo cual es necesario el voto de dos tercios de los cancilleres y que solo ocurrió tras el golpe de Estado de Honduras en 2009.