Exalcaldesa afgana pide solidaridad de «mujeres del mundo» para salvar su país
EFE
La activista y exalcaldesa afgana Zarifa Ghafari pidió hoy desde Alemania la «solidaridad» de las «mujeres de todo el mundo» frente a la tragedia de su país y advirtió que la toma del poder por los talibanes pone en peligro «a la nación entera».
«Debemos levantarnos a favor de todas las mujeres, niños y hombres de Afganistán. Debemos hablar de lo que ha ocurrido en estos 20 años, necesitamos la solidaridad de las mujeres de todo el mundo», afirmó Ghafari, en una intervención virtual, coordinada desde Berlín por la plataforma germano-iraquí Hawar Help.
Ghafari, quien logró salir de su país junto a su esposo y llegar a Alemania, donde residen familiares suyos, lanzó esta dramática advertencia, al borde de las lágrimas, mientras recordaba que los esfuerzos internacionales deben centrarse en ayudar «a todo mi país», no solo a los que ya consiguieron salir de él.
La activista pro-derechos humanos se convirtió en 2018 en alcaldesa de la ciudad de Maidan Sahar, capital de la provincia de Vardak. Es un icono en la lucha por el reconocimiento de los derechos de la mujer en su país y, tras su salida de Afganistán, lleva a cabo una intensa campaña ante las autoridades alemanas.
«Corremos el peligro de dividir la suerte de los afganos entre los que Occidente considera legitimados para ser rescatados, porque fueron sus colaboradores, y el resto del país, cuando en realidad está amenazada toda la población», apuntó en ese mismo foro Marjan Haidan, activista germano-afgana de la ONG Global Movement for Peace in Afghanistan.
La plataforma Hawar Help, hasta ahora dirigida a proyectos alemanes de ayuda a Irak, se ha convertido ahora en pantalla de las llamadas de activistas por los derechos de la mujer en Afganistán.
Vías civiles de rescate
La comparecencia ante los medios de hoy, en formato híbrido, coincide con la gira del ministro de Exteriores alemán, Heiko Maas, por diversos países de la región, como Uzbequistán y Tayikistán, además de Turquía, en busca de fórmulas para seguir rescatando a afganos tras la retirada de las tropas internacionales.
En el operativo de evacuaciones, que el Ejercito alemán cerró la semana pasada, se logró sacar del país a unas 4.600 personas, entre ellas 3.850 afganos y unos 400 alemanes, mientras que el resto corresponde a otra nacionalidades.
De estos 3.850 afganos apenas unos 640 habían sido colaboradores locales propios de Alemania o sus familiares directos. El Gobierno alemán estima en unos 40.000 el número de afganos legitimados para ser rescatados, entre contratados locales, colaboradores de ONG y otras organizaciones alemanas, activistas o periodistas, así como las personas de su núcleo familiar.
Para la evacuación en aviones militares se organizó un puente aéreo entre Kabul y Uzbequistán, tras lo cual esas personas eran transportadas a Alemania por la aerolínea Lufthansa.
Uzbequistán se ha mostrado dispuesta a mantener la colaboración con Berlín, si se consigue establecer esa vía civil y siempre bajo la condición de que esas personas no se quedarán en su territorio, sino que serán trasladadas a Alemania. EFE