Estudiante descubre dolorosa verdad sobre sus padres en clase de biología
ABC
En el instituto y la universidad podemos aprender sobre historia, matemáticas, idiomas y muchísimas cosas más. Lo que no esperamos al asistir a clases es descubrir cosas importantes sobre nosotros mismos y nuestros familiares. Sin embargo, los conocimientos adquiridos en un aula pueden ser la llave que desentierre secretos largamente ocultos. Incluso para acabar desencadenando un divorcio, tal como ha ocurrido en California, en un insólito caso que ha dado a conocer una usuaria de Twitter llamada Anya Hettich.
Fue una compañera de clase de Anya quien empezó a atar cabos en una clase de biología, cuando la profesora explicó el cuadro de Punnett a sus alumnos. Se trata de un diagrama útil para determinar las posibilidades de que el hijo de dos personas pertenezca a un grupo sanguíneo u otro. Tras escuchar a la docente, la estudiante expresó sus dudas. Entendía el funcionamiento del cuadro, pero su tipo de sangre no encajaba con sus indicaciones. Había algo que no encajaba.
«Le dijo a la profesora que su padre tenía sangre tipo 0 y que su madre pertenecía al A, pero que ella era AB», publicó Anya en Twitter. Según el cuadro de Punnett, es imposible que una hija de A y 0 sea AB, tal como subrayó la maestra al escuchar a su alumna. «Le dijo que tenía que estar equivocada respecto a los grupos sanguíneos, incluso dibujó el diagrama para hacérselo ver», continúa la tuitera, cuyo hilo de mensajes ha recibido decenas de miles de interacciones.
A pesar de la explicación, la universitaria insistió en sus dudas, convencida de que el error era de la profesora. Finalmente acordaron que comprobara de nuevo su tipo sanguíneo y el de sus padres para entender dónde estaba el problema. Una semana después, la estudiante hizo una sorprendente revelación ante sus 243 compañeros. «Había descubierto que su madre había tenido una aventura con el hermanastro de su padre. Por tanto, fue criada por su tío y no por su verdadero padre. Su madre lo había ocultado durante 21 años», cuenta Anya Hettich.
Las lecciones de biología provocaron que la joven revisara la documentación médica de sus familiares. Tras certificar que no había ninguna posibilidad de que fuese hija de quien creía, continuó tirando del hilo y descubrió por sí misma la verdad, que su madre no pudo negarle. La consecuencia definitiva, según el último post del hilo viral, es el divorcio. Un desenlace que nadie imagina cuando inicia estudios universitarios.