Estos son los pueblos donde todo el año es Navidad
Redacción 800noticias.- Existen predios en el mundo en el que parece que la Navidad o algunas de sus condiciones está presente durante todo el año y no delimitado a una temporada en específico. Para retratar esas condiciones BBC Mundo realizó una recopilación de las anécdotas de esos pueblos en los que se permanece bajo ese retrato.
Cada mañana, Paul Brown saluda a Santa Claus, que ocupa una oficina debajo de la suya, localizada convenientemente en la calle San Nicolás, en el Polo Norte, en Alaska.
Al crecer en Fairbanks, a solo 22 kilómetros del pueblo dedicado a la Navidad, la familia de Brown pasaba con frecuencia a través del Polo Norte en dirección a su cabina de vacaciones.
Pasaban por sitios como la Calle del Muñeco de nieve, escuchando música de Navidad que salía de las tiendas incluso en verano.
En realidad, este Polo Norte -con una población de solo 2.214 personas- está a 2.700 kilómetros del Polo Norte geográfico.
En la actualidad Brown dirige la Casa de Santa Claus, una tienda de Navidad que abre todo el año y que existe en el Polo Norte desde 1952, con su mujer Carissa, nieta del propietario originario de la tienda.
Desde el hogar «oficial» de Santa Claus -en Rovaniemi, Laponia- a Santa Claus -una localidad de Indiana- los pueblos con nombres de Navidad o dedicados a la misma se enfrentan a sus propios retos.
Algunos son de esperar, como las condiciones climatológicas extremas y la recepción de cientos de miles de cartas a Santa.
Pero el mayor obstáculo al que se enfrentan es justificar la apertura durante todo el año, cuando su modelo de negocio es estacional.
El reto de hacer que la Navidad dure todo el año
Para algunos de los habitantes de estos pueblos vacacionales, los paseos en trineo llevado por renos, el acceso a las barritas típicas de caramelo en el mes de julio y una vista espectacular de la aurora boreal en lugares como Finlandia y Alaska, hace que merezca la pena tener que lidiar con grandes fluctuaciones económicas a lo largo del año.
Los dueños de negocios inventan soluciones creativas para aguantar todo el año, como trasladar a los trabajadores permanentes entre departamentos, o incluso inventar distintas actividades.
Algunos de los pueblos también tienen consejos de turismo que mantienen campañas activas en las redes sociales y promueven puestos de trabajo locales.
Algunos negocios cierran durante los meses más fríos del invierno y vuelven a abrir en verano para capitalizar los influjos de turistas que llegan al pueblo por razones que no tienen que ver con las vacaciones, incluyendo festivales o visitas a los parques temáticos.
Y aunque pueda parecer raro ir de compras de Navidad en verano, algunos piensan distinto.
«Es una novedad para mucha gente darse cuenta de que pueden introducirse en el espíritu navideño en junio, julio y agosto«, dijo Brown.
«Somos un negocio de todo el año, pero vamos a 100 kilómetros por hora durante el verano con un respiro en octubre que nos permite prepararnos para la Navidad«.
Buenos tiempos
Atraídos por actividades como visitar la granja de renos de Santa en una moto de nieve o ir de compras en el pueblo de Santa, miles de turistas acuden cada año a Rovaniemi, Finlandia, conocido como «El pueblo oficial de Santa Claus».
La elfa de la información, Sonja Alaraatikka, dice que a Rovaniemi llegan 10 veces más visitantes durante el invierno que en otras estaciones.
Para manejar ese flujo, Alaraatikka dice que los negocios locales contratan a trabajadores temporales, muchos de ellos estudiantes de vacaciones de la escuela.
«Solo en un fin de semana en diciembre, nuestra tienda puede hacer el mismo negocio que en todo el mes de mayo, o incluso más», afirma Shelly Haibari, gerente en la Tienda de Navidad de Santa Claus, en la localidad de Santa Claus, en Indiana.
Estos puestos estacionales pueden ser buenos para la gente desempleada, como Haibari, para quien su trabajo a tiempo parcial de vacaciones se acabó convirtiendo en un puesto a tiempo completo.
Haibari cuenta que desde el año pasado, la tienda cierra desde enero hasta mayo, porque los dueños descubrieron tras cuatro años abiertos, que no merecía la pena seguir trabajando durante esos meses.
Sin embargo, la tienda tiene bastantes clientes en los meses de verano porque se encuentra cerca de un parque temático, el Holiday World, que es una gran atracción turística abierta entre mayo y octubre.
«Normalmente, a todo el pueblo le va bien en algunos momentos, y el negocio baja para todos en otros«, dijo Haibari.
«Pero los buenos tiempos nos mantienen durante todo el año«.
Diversificación
Otras empresas en pueblos navideños siguen en pie todo el año.
Heidi Haavikko, copropietaria del Hotel de Nieve Ártico y los Iglús de Cristal en Finlandia, dice que aunque a veces casi no ganan nada en mayo, lo que han hecho es diversificar su negocio en los periodos más lentos.
El hotel boutique, situado a 26 kilómetros de Rovaniemi, añadió una sauna, un restaurante y un bar para atraer a gente que no quiere pagar US$155 para quedarse en su hotel esculpido en la nieve.
En verano, cuando se derriten las habitaciones del hotel, celebran eventos especiales como bodas.
«Es un negocio muy difícil», dijo Haavikko. «Mi marido y yo trabajamos al menos 400 horas al mes para conseguir rentabilidad«.
En el Polo Norte, Brown relata que muchos cierran sus negocios y se van de vacaciones en enero y febrero, cuando las temperaturas alcanzan los -45 grados y el sol solo sale cuatro horas al día.
Al irse, se ahorran dinero en gastos de la casa: los habitantes del interior de Alaska pueden gastar entre US$6,000 y US$15,000 al año en calefacción de aceite dependiendo del tamaño de la casa, dice Brown.
No el típico pueblo
Pero ojo: el hecho de que un pueblo tenga un nombre navideño, no significa que esté de celebraciones todo el año, como en Christmas Island (la isla de Navidad), en Australia, o Christmas, en Florida.
«Es solo un pueblo normal con un árbol de Navidad permanente«, dice Chelsea Brooks, líder recreativo en el Fort Christmas Park en Christmas, Florida.
«De vez en cuando llega gente que viene esperando ver muchas decoraciones navideñas, o preguntando por un restaurante temático, pero no tenemos ese tipo de cosas».
Aunque los turistas con grandes expectativas a menudo se sienten desencantados por el pueblo, muchas personas hacen el viaje solo para sellar sus cartas con un sello de goma que dice «Saludos desde Christmas, Florida».
Según la oficina postal, los ingresos se doblan en diciembre, cuando ponen el sello en 20.000 tarjetas y cartas al día con su matasellos especial.
«Se llena la oficina, porque es lo que hay que hacer», dijo Brooks. «La gente viene de todos lados solo para esto, de incluso fuera del estado».