¿Estás cargando bien tu batería?
Agencias
Llegar al final del día con un nivel de carga que sobrepasa el 30% es una utopía en los días que corren. Casi siempre, como parte de nuestra extensa rutina laboral o estudiantil, los niveles de carga se reducen por el uso de uno o varios componentes al mismo tiempo, y vemos cómo drena rápidamente la energía desde nuestros dispositivos casi sin hacer nada.
En esta nota, hemos intentado resumir las variables y dudas más comunes sobre la batería, además de erradicar actividades que realmente dañen tu equipo. Eso sí, considera que los teléfonos más caros cuentan con mejores mecanismos de protección, además de sistemas propios de enfriamiento y aditivos que mejoran la vida de la batería.
Antes de usar el equipo, debes descargar a batería a cero. Con el tipo de baterías que llevan los teléfonos más recientes, esto ya no es necesario. Al contrario, resulta perjudicial para el equipo descargarlo por completo. Por norma, tu teléfono nunca debería bajar del 20% de carga.
Para usarlo por primera vez, debe cargar al 100%. No es necesario. Por regulación, los equipos ya vienen con un mínimo de 40% de carga al momento de encenderlos pro primera vez. Ese nivel de carga es suficiente para que el equipo reciba actualizaciones, descargue apps y sincronice contactos y datos. No es necesario esperar a que cargue al 100%.
Antes de encender el smartphone por primera vez, hay que dejarlo cargar 12 horas. Es un hábito que debemos erradicar. Las baterías de los teléfonos son tan inteligentes que ya no se requiere un tiempo de carga criminal. Sácalo de la caja, préndelo y úsalo sin problemas.
Con el uso las baterías se degradan. Sí, y por eso debemos cuidarlas. Para hacerlo, aplica un principio clave: no permitas que tu teléfono llegue a 20% de carga o menos durante el día. Si eso ocurre, conecta el equipo al cargador. Lo peor que le puede pasar a tu equipo es que llegue a cero todos los días. Eso degrada más rápido la vida útil de la batería.
Son mejores las cargas cortas y frecuentes. Sí, y mucho. Equilibrar el uso de la carga energética le permite al equipo estabilidad. Jugar entre el 40 y 80% de carga lo mantendrá de buena salud.
Tener el Bluetooth, el GPS y el WiFi prendido reduce la energía. Eso es algo que tendremos que balancear en nuestra vida. Si sueles estar más en la calle que en una oficina o tu casa, desactiva las funciones que no requieran conectividad WiFi. Sin embargo, el Bluetooth no entra en discusión cuando usamos periféricos como audífonos, relojes, scooters o cualquier otro dispositivo asociado al teléfono.
Antes de guardar un teléfono que no uses, déjalo con 100% de carga. Esto no es recomendable por razones de seguridad. Y si hablamos de la capacidad de un equipo mientras no está en uso, tampoco podemos dejarlo en cero para almacenarlo. Lo mejor es tenerlo con un promedio de 40%.
No puedes usar el teléfono mientras carga. Esto tómalo con pinzas. No está mal usar el teléfono mientras está conectado, pero también depende mucho lo que vayas a hacer. Si estresamos al procesador con actividades gráficas pesadas, mientras cargamos de energía eléctrica el equipo, seguramente el calor será más intenso. Si vas a escuchar música o revisar mensajes, pues no pasa nada.
No dejes el teléfono cargando sobre la cama. Este error es muy frecuente. Usualmente, las telas y cobijas previenen que el calor corporal escape, y suelen intensificar estas fuentes para comodidad. Si mantenemos un teléfono sobre la cama mientras carga, el calor del equipo será mayor.
No es bueno dejar el teléfono cargar toda la noche. Es una afirmación para considerar. SI bien las baterías están preparadas para ciclos largos, a la larga sí podría generar un problema de desgaste. Lo mejor es cargar el equipo en la noche y desconectarlo antes de dormir. Al despertar, mientras nos alistamos, dejaremos cargar el equipo nuevamente.
La carga rápida no es recomendable para todos los equipos. Lo recomendable es usar el cargador que viene en la caja, o accesorios que cuenten con certificaciones. Un cable barato, o un cargador cualquiera podría generar problemas en equipos incompatibles con el tipo de carga.
Cargar el teléfono con la PC o la laptop puede dañar el equipo. Falso. Si tenemos la chance de cargar de manera lenta nuestro equipo, pues es lo mejor. La salida de voltaje en las computadoras es mucho menor que en las tomas de electricidad, por lo que la velocidad de carga será menor.
Apagar el equipo ayuda a guardar batería. No. Eso ya no es parte del estándar. Hoy los teléfonos dosifican de igual manera la autonomía con el teléfono bloqueado que con el equipo apagado. En el caso de las baterías de Ion-Litio, el nivel de estrés es casi el mismo en ambos estados.
Hay aplicaciones que permiten una carga más veloz. Ni de broma. Eso no es posible por software. No lo intentes. Vas a perder tu tiempo.
Hay aplicaciones que permiten que el equipo se enfríe más rápido. Tampoco. Erradiquemos eso. Los sistemas de enfriamiento de algunos equipos de gama alta están elaborados con aleaciones y pequeños ductos con líquido que recrean ciclos de condensación para enfriar el dispositivo. Por software, no hay forma de hacer eso.
La batería carga más lento cuando tiene más energía. Es cierto. Justamente, por seguridad, se establece que los últimos tramos de carga demanden “velocidades menores” de ingreso de energía. En el caso de niveles de carga muy bajos, la inyección de energía es muy veloz.
Nunca pongas una powerbank sobre al teléfono mientras carga. Acercar ambos equipos mientras se produce el proceso de carga provoca el incremento de calor, y ya hemos leído bastante sobre ese tema aquí.
RPP