Esposo de Ortega Díaz niega su firma en documentos que le incriminan
EFE
El diputado disidente del oficialismo Germán Ferrer, esposo de la fiscal venezolana Luisa Ortega, negó este miércoles categóricamente que la firma que figura en documentos presentados por la Fiscalía para incriminarle en una supuesta trama de extorsión sea la suya, y pidió que se compare con su rúbrica para demostrarlo.
«Qué indignación. Mostrando firmas que no he hecho de documentos que no resisten la mas mínima prueba. Reto a que comparen lo que el presenta con una firma original mía para desenmascararlo por inmoral», dijo Ferrer al medio local Punto de Corte, en alusión a la supuesta rúbrica enseñada hoy por el recién juramentado fiscal por la Asamblea nacional Constituyente Tarek William Saab
Saab presentó ante los medios «documentos originales» que probarían que Ferrer y altos cargos de la Fiscalía durante el mandato de su esposa -que fue titular del Ministerio Público desde 2007 hasta su reciente cese- abrieron cuentas en las Bahamas para ingresar los «millones de dólares» que recibían de la extorsión.
Según Saab -que pidió que se le retire la inmunidad parlamentaria a Ferrer y se le prive de libertad junto a sus presuntos cómplices- la trama cobraba elevadas cantidades en dólares a quienes extorsionaba, a cambio de no emprender contra ellos acciones penales.
«Como es tan cínico y mentiroso un personaje como Tarek», declaró Ferrer, que denunció el «neofascismo» del Gobierno venezolano y apeló a «la solidaridad del venezolano de bien».
Ferrer es parlamentario del Frente Democrático Bolivariano, un grupo de diputados chavistas escindido recientemente del bloque oficialista por disconformidad con el rumbo tomado por el gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).
La solicitud de Saab -a la que no ha respondido por el momento el Tribunal Supremo de Justicia- llegó minutos después de que miembros de la Asamblea Nacional Constituyente instaurada por el oficialismo denunciara ante el Ministerio Público la supuesta red de extorsión.
La Constituyente destituyó de forma fulminante a Ortega nada más ser instalada el pasado 4 de agosto, después de semanas de ataques desde las filas oficialistas a la fiscal por su supuesta «complicidad» en unas protestas opositoras a las que el presidente Nicolás Maduro se refirió como «insurgencia armada».
Luisa Ortega rompió con el oficialismo hace meses al denunciar la ruptura del «hilo constitucional» en Venezuela, y ha denunciado la Constituyente como un instrumento para consolidar un «sistema totalitario» en Venezuela.