Escasez de productos regulados no disminuirá en lo que queda de 2015
La disponibilidad de los productos con precio regulado fue deficitaria en supermercados privados y en la red oficial en el primer semestre. Especialistas aseguran que la escasez no disminuirá en lo que queda de año. Advierten que tenderá a empeorar para el último trimestre, aunque podría haber un alivio en noviembre como estimulo electoral.
“Económicamente es inviable el abastecimiento de productos regulados por la falta de disponibilidad de divisas para importar debido al derrumbe del precio del petróleo”, expresó Luis Vicente León, director de la firma Datanálisis.
Dijo que el país nunca se ha autoabastecido, pero ahora es altamente dependiente de las importaciones como resultado de las políticas del gobierno. Cuando el presidente Hugo Chávez llegó al gobierno, en 1999, el aparato productivo era pujante y el porcentaje de importaciones para satisfacer el consumo era menor. Recordó que en 2008, del total de importaciones, 11% correspondió al sector público. Actualmente se sitúan en 60%.
Aseveró que no es fácil resolver la escasez porque la raíz del problema tiene que ver con los controles de cambio y de precios que impuso el gobierno desde hace once años, con el desestímulo a las importaciones del sector privado, con la desconfianza de las casas matrices y proveedores internacionales que cerraron los despachos a Venezuela por la falta de pago, y con la distorsión cambiaria que favorece el bachaqueo.
Comportamiento
Oscar Meza, director del Cendas-FMV, señaló que el problema de escasez es estructural y que es consecuencia de 16 años de un modelo político que acabó con el aparato productivo: “Las medidas oficiales lejos de impulsar el autoabastecimiento han estado orientadas a reducir y controlar a los productores nacionales, a implantar regulaciones y fiscalizaciones asfixiantes, expropiar, invadir y negar las divisas para materias primas y maquinaria. Además de exigir el cumplimiento de una Ley de Precios Justos que no cubre costos”.
Entre enero y julio en los anaqueles faltaron entre 17 y 20 de los 58 productos prioritarios que constituyen la casta básica familiar, dice el informe del Cendas-FVM. El indicador de escasez se situó entre 29,3% y 34,5% en los primeros siete meses del año.
La constante entre enero y julio fue la escasez de leche en polvo, sardinas enlatadas, margarina, azúcar, aceite de maíz, arroz, harina de trigo y de maíz, pastas alimenticias, café, mayonesa, pollo, carne de res, queso blanco duro, queso amarillo a precio regulado. También faltaron el atún y los granos, añadió.
Explicó que la diferencia entre los precios controlados y los precios en los que se consiguen los artículos en el mercado fue de 683,96% en julio y que resulta imposible para una familia cuyos ingresos son 2 sueldos mínimos, 14.900 bolívares aproximadamente, pagar 41.682 bolívares por la cesta básica.
Ni para los teteros de un día
De no llegar las importaciones de leche anunciadas por el Ejecutivo la situación será más dramática, advirtió Roger Figueroa, presidente de la Cámara Venezolana de la Industria Láctea.
En 1999 cuando Hugo Chávez asumió el poder se consumían 83,6 litros de leche por persona al año y se satisfacía 68,1% de la demanda con producción nacional. En 2013, última data, el consumo aumentó a 102,5 litros de leche y se producía solo 30% del consumo, recordó.
Indicó que la producción interna de leche crece a ritmo lento y no hay expectativas de que se resuelva el desabastecimiento porque no se han implementado políticas adecuadas. “No hay insumos ni repuestos para la maquinaria. Tampoco alimentos y se necesitan dólares para mejorar la genética de los animales”. Agregó que deben 300 millones de dólares a sus proveedores y mientras no les cancelen no les despacharan.
Informó que a Puerto Cabello llegaron 750 toneladas de leche. “Esto significa medio día de trabajo de una empacadora y no alcanza ni para preparar los teteros de los niños de un día”.
No hay suficiente café
La primera proyección de la cosecha de café de este año es de 700.000 quintales y debería llegar a los anaqueles en octubre. Sin embargo, la demanda es de 2,4 millones de quintales, lo que significa que el gobierno tendría que importar 1,7 millones para atender el consumo, consideró Vicente Pérez, directivo de Fedeagro. El Ejecutivo anunció la llegada de 600.000 quintales; es decir, que quedaría 35,3% de la demanda insatisfecha.
Cuando Hugo Chávez llegó al gobierno el primer problema que enfrentó fue un excedente en la producción nacional de 350.000 quintales de café y la caída del precio del rubro en el mercado internacional, lo que hacia difícil la exportación. Se producían 1,2 millones de quintales. Chávez le compro a los productores el excedente a través de la bolsa agrícola y lo vendió a Moscú, agregó. “Se abrió un nuevo mercado compitiendo con los colombianos, pero hace 8 años que no se exporta”, dijo.
Pérez aseguró que la falta de rentabilidad para el caficultor ha ocasionado la merma en la productividad, además de rezago tecnológico y la falta de agroquímicos.
Insuficiente producción de azúcar
Endulzar bebidas y preparar postres seguirá siendo cuesta arriba. De 16 centrales azucareros que operan en el país, 10 son públicos y solo trabajan 8 pero a 50% de su capacidad, aseveró José Ricardo Álvarez, presidente de la Federación de Asociaciones de Cañicultores.
Refirió que este año el consumo se mantiene en 1,2 millones de toneladas de azúcar y la producción llegará a 400.000 toneladas por falta de caña; es decir que 66,6% de la demanda debe cubrirse con importaciones. En 1999 se producían alrededor de 600.000 toneladas y el consumo estaba en aproximadamente 900.000 toneladas: se satisfacía 67% del consumo interno.
Álvarez dijo que el abastecimiento es responsabilidad del Estado y espera que lo haga. Apuntó que la producción ha caído principalmente por la falta de repuestos para la maquinaria agrícola y porque el cultivo del rubro ha dejado de ser rentable. En la zafra anterior se reconocía 13 bolívares por el kilo y debería haber sido 21 bolívares, pero siguen esperando la compensación del gobierno.
Fuente: El Nacional