Empresario desenterró a su gato y lo clonó
Agencias
Garlic estaba muerto y Huang Yu no podía remediarlo. Así que un frío día de invierno, enterró el cadáver de su gato en un parque cercano a su casa.
Horas después, aún devastado, el empresario de 22 años recordó un artículo que había leído acerca de la clonación de perros en China. ¿Y si algún día pudiera revivir a Garlic?
“Garlic es irremplazable para mí”, comentó Huang, quien desenterró a su gato británico de pelo corto y lo puso en el refrigerador como preparación para la clonación. “Garlic no dejó descendencia así que solo podía clonarlo”.
Eso también indica que China podría convertir la clonación de mascotas en un negocio viable. De acuerdo con los expertos, duplicar perros y gatos no ha tenido mucho éxito en Estados Unidos ni en ninguna otra parte. Sin embargo, en la China obsesionada con sus mascotas podría ser diferente. Se espera que el tamaño del mercado nacional de las mascotas en China alcance los 28.200 millones de dólares este año, un aumento de aproximadamente una quinta parte respecto de 2018 de acuerdo con Gouminwang, una consultoría de mascotas en Pekín. El país ya tiene 55 millones de perros y 44 millones de gatos como mascotas y la demanda de los gatos está creciendo aceleradamente.
La clonación de mascotas no se limita a China (Barbra Streisand declaró el año pasado que dos de sus perros son clones) y los gatos han sido clonados durante años, pero Garlic es el primer gato clonado por China, lo que ha fortalecido su posición entre los países que más clonaciones realizan, los cuales incluyen a Estados Unidos, el Reino Unido y Corea del Sur.
Mi Jidong, director ejecutivo de Sinogene, afirmó que la empresa decidió comenzar a clonar mascotas en 2015 tras realizar una encuesta entre aproximadamente mil personas que demostró que había demanda. La empresa ha clonado a más de cuarenta perros, incluyendo schnauzers, pomeranos y malteses, a un costo de 53.000 dólares cada uno, algunos para ser mascotas y otros con fines de investigación médica.
De acuerdo con Mi, es más costoso clonar perros que gatos, ya que el periodo en que es posible recolectar óvulos es muy breve en los perros. Afirmó que más de cien personas han almacenado muestras de ADN de sus mascotas con la expectativa de clonarlas.
El esfuerzo que realizó Sinogene durante un año para clonar un gato fue motivado por investigaciones de mercado que demostraron que los gastos están cobrando cada vez más popularidad en China, dijo Mi, quien jamás ha tenido una mascota. (“Los gatos y los perros necesitan muchos cuidados”, comentó).
La experiencia de China en genética crece a gran velocidad. Desde que los científicos chinos clonaron a una cabra en el 2000, han logrado producir los primeros clones de primate en el mundo al modificar embriones de monos para insertar genes asociados con el autismo y algunas enfermedades mentales, y crear perros superfuertes mediante experimentos genéticos. El año pasado, el país asombró al mundo después de que un científico chino anunció que había creado a los primeros bebés genéticamente modificados.
La clonación de mascotas casi no está regulada y es bastante controvertida en los lugares donde se practica, pero en China las barreras son especialmente bajas. Muchos chinos no consideran que utilizar animales para investigaciones médicas o cosméticas sea maltrato ni que la clonación de mascotas pueda llegar a generar problemas. Tampoco tienen leyes en contra del maltrato animal.
“Esta práctica satisface las necesidades espirituales del dueño y aumenta la felicidad”, comentó Wang Chuduan, profesor en la Universidad de Agricultura de China, en Pekín. “Hay una demanda en el mercado, entonces, ¿cuál es el problema?”.
Sinogene tiene ambiciones más allá de los perros y gatos: están clonando un caballo. Mi afirmó que la siguiente meta importante será clonar animales en peligro de extinción, incluyendo a osos panda y al tigre del sur de China.
“Creo que será muy difícil y necesitaremos más tiempo”, dijo Mi en una sala de conferencias rodeada de fotografías enmarcadas que muestran los casos de clonación exitosos de su empresa, como el primer perro policía de China.
Los críticos se oponen a la clonación de mascotas por considerarla ineficiente e inhumana. No está claro qué sucederá con los animales resultantes ni el efecto que causarán cuando se mezclen con el acervo génico más amplio. Los recursos podrían invertirse, en todo caso, en el cuidado de animales que ya existen, señalan los críticos.
Jessica Pierce, una bioeticista de la Universidad de Colorado en Denver, habló del uso de gatas como madres subrogadas para gestar clones, lo cual, señaló, era “similar al daño que le harías a una mujer cuyo único propósito fuera ser una máquina de reproducción para el hombre”.
“La gata no tiene ningún valor intrínseco”, dijo Pierce. “Es utilizada como un objeto, como un medio para el fin de alguien más”.
Para clonar a Garlic, los científicos implantaron células de piel del gato original de Huang en óvulos recolectados de otras gatas. Después de un choque eléctrico o químico, se implantaron cuarenta embriones clonados en cuatro gatas que actuaron como madres subrogadas. Eso dio como resultado tres embarazos, dos de los cuales no se lograron, dijo Chen Benchi, director del equipo de experimentos médicos de Sinogene.
The New York Times