Empresa de crucero portugués desmiente versión de Maduro
Con información de Diario Las Américas
La empresa Columbia Cruise Service desmintió en un comunicado la versión del régimen de Nicolás Maduro sobre el accidente marítimo ocurrido la madrugada del lunes 30 de marzo en aguas internacionales con el crucero RCGS Resolute, a 13.3 millas náuticas de la Isla de la Tortuga, en el que una embarcación venezolana terminó hundido.
«En las primeras horas de la mañana del 30 de marzo de 2020 (hora local), el crucero RCGS Resolute ha sido objeto de un acto de agresión por parte de la Armada venezolana en aguas internacionales», denunció la compañía.
Sin embargo, la régimen de Venezuela, liderado por Nicolás Maduro, presentó el hecho al mundo como una agresión en su contra.
«Uno se puede preguntar mil cosas en esta época en que el imperialismo [estadounidense] ha enloquecido para agredir a Venezuela de manera multiforme», dijo el dictador Nicolás Maduro, por quien EEUU ofrece una recompensa de $15 millones al acusarlo de narcoterrorismo. “Sería muy ingenuo ver esto como un accidente de carácter aislado”, dijo Maduro el martes.
Sin embargo, el documento hecho público por Columbia Cruise Services refiere que «poco después de la medianoche, el crucero fue abordado por un buque armado de la armada venezolana, que por radio cuestionó las intenciones de la presencia del Resolute y le dio la orden de seguirlo a Puerto Moreno en la Isla de Margarita. Como el RCDS Resolute navegaba en aguas internacionales en ese momento, el capitán quería volver a confirmar esta solicitud en particular, lo que resultó en una desviación grave de la ruta programada del barco».
«Mientras el capitán estaba en contacto con la oficina central, hubo disparos de pistola y, poco después, el buque de la Armada se acercó al lado de estribor a una velocidad de 135° y colisionó deliberadamente con el Resolute. El buque militar continuó golpeando la proa de estribor en un aparente intento de girar la cabeza del barco hacia las aguas territoriales venezolanas».
El comunicado de Columbia Cruise Service advierte además que «si bien el RCGS RESOLUTE sufrió daños menores, sin afectar la navegabilidad del barco, el barco de la marina [de Venezuela] sufrió daños graves al hacer contacto con la proa bulbosa reforzada del crucero de expedición (…) y comenzó a tomar agua.
«Listo para apoyar en cualquier momento, el RRCGS RESOLUTE permaneció durante más de una hora cerca de la escena y se acercó al Centro de Coordinación de Rescate Marítimo (MRCC) de Curazao. Este es un organismo internacional que supervisa cualquier emergencia marítima. Todos los intentos de contactar a los que estaban a bordo del barco de la armada quedaron sin respuesta.
«Solo después de recibir la orden de reanudar el paso por delante por el MRCC y de que no se requiere asistencia adicional, el RCGS RESOLUTE, actualmente amarrado de forma segura en el puerto de Willemstad, continuó navegando hacia su destino en Curazao. Ahora se llevará a cabo una investigación completa de las circunstancias que rodearon el incidente».
Sobre el incidente, el diario expresso de Portugal reseña que si bien la embarcación, que sufrió daños en la proa y está anclada en Curazao, está registrada en el país luso, la tripulación es totalmente ucraniana.
«Venezuela exige al Gobierno de los Países Bajos que, en apego al Derecho Marítimo Internacional, abra las averiguaciones correspondientes a la tripulación del buque Resolute, atracado en Curazao, por la grave agresión que cometieron contra el buque guardacostas venezolano Naiguatá», dijo en Twitter Jorge Arreaza, minitstro de Exteriores del régimen, petición que también hizo la empresa a cargo del Resoluto.