Empleados de Apple protestan ante el fin del teletrabajo
EFE
El conflicto era previsible y el primer lugar en el que ha estallado, al menos que se sepa, ha sido en Apple. Los trabajadores del gigante tecnológico de Cupertino, California, quieren mantener la opción de trabajar lejos de las oficinas de una forma mucho más flexible de la establecida por los directivos de la empresa, y como estos han hecho oídos sordos a sus peticiones, les han dirigido una carta interna en la que critican la desconexión de los dirigentes con sus empleados y piden mayores opciones de trabajo en remoto.
La carta interna, a la que tuvo acceso el diario estadounidense The Verge, es una respuesta al comunicado que difundió Apple a los empleados el pasado miércoles, en el que Tim Cook, CEO de la compañía, informaba de que a partir de septiembre volverían a la oficina de forma obligatoria tres días a la semana -lunes, martes y jueves- y podrían teletrabajar los restantes. Además, también les permitirán trabajar dos semanas al año completamente en remoto.
A los trabajadores de Apple estas medidas les parecen insuficientes y afirman que en el último año han sentido que les ignoran de forma activa, porque mientras muchos de ellos disfrutaban trabajando en casa, la empresa difundía mensajes como “sabemos que muchos de vosotros estáis ansiosos por volver a la oficina”. Algo que les ha hecho sentir que hay una desconexión entre lo que piensan los directivos sobre el trabajo en remoto y las experiencias vividas durante la pandemia por los trabajadores con esta modalidad laboral.
Los empleados de la tecnológica de Cupertino señalan que la flexibilidad con el trabajo en remoto es una opción que favorece la inclusión y la diversidad, porque brinda a cada trabajador la oportunidad de elegir la forma en la que mejor desempeña su labor. Y afirman que en este momento, tras el mensaje difundido la semana pasada por la empresa, sienten que tienen que escoger entre su bienestar y sus familias o sus carreras y seguir formando parte de Apple. Una elección que, aseguran, muchos de ellos preferirían no tener que tomar.
Por todo esto, los trabajadores de Apple piden a la compañía que sea más flexible con las opciones de trabajar en remoto, que se pregunte a los empleados que se marchan si se van por la falta de flexibilidad con el teletrabajo en una encuesta y que comparta información sobre el impacto ambiental que supondrá la vuelta a la oficina.
La de los trabajadores de Apple no es la única protesta de empleados que piden mayor flexibilidad con el teletrabajo, pero sí es la primera que, de forma conjunta, se hace pública en una gran tecnológica. Conforme la vacunación avanza y la nueva normalidad se acerca, se está empezando a abrir una brecha entre directivos y subalternos relativa al trabajo híbrido que amenaza con desembocar en un conflicto laboral.
Y es que las empresas han empezado a revertir sus opciones de teletrabajar y muchas de ellas han optado por un modelo híbrido que, en muchos casos, como en el de Apple, los trabajadores consideran insuficiente. Otras, directamente, no ofrecen la posibilidad de teletrabajar y han pedido a buena parte de sus plantillas que regresen a las oficinas todos los días de la semana.
Con información de Xataca