Empieza el segundo día de la cumbre europea, centrada en el Covid-19 y el clima
EFE
Los jefes de Estado y de Gobierno de los países de la Unión Europea (UE) iniciaron este martes la segunda jornada del Consejo Europeo, en la que discutirán cara a cara sobre la crisis de la Covid-19 y sobre política climática.
En la jornada del lunes, los líderes de los Estados miembros acordaron sancionar a Bielorrusia por el secuestro de un avión civil europeo, condenaron las «actividades provocadoras» de Rusia hacia la UE y reafirmaron su compromiso con la solución de dos Estados, uno palestino y otro israelí, para el conflicto de Oriente Medio.
En cuanto a la Covid-19, se espera que los líderes acuerden la donación de 100 millones de dosis este año a terceros países y que celebren la aprobación del certificado digital sobre vacunación en la UE, que se implementará a partir del 1 de julio.
«Es particularmente importante para el impulso a nuestra economía (…) durante la temporada turística», dijo a su llegada el primer ministro de Croacia, Andrej Plenkovic, uno de los pocos líderes que tomó la palabra ante la prensa este martes antes del comienzo de la reunión.
«Creemos que todo el mundo que se ha recuperado de la Covid, se ha sometido a un test o ha sido vacunado podrá moverse con más libertad dentro de las fronteras europeas», agregó.
Los líderes también abordarán cómo alcanzar el objetivo de reducir las emisiones de CO2 al menos un 55 % en 2030, a expensas de que la Comisión Europea presente una amplia batería de propuestas legislativas el próximo 14 de julio.
En concreto, debatirán sobre el reparto de esfuerzos por los Estados miembros, con la idea inicial sobre la mesa de que se les exija menos a los países con menor renta per cápita.
Con vistas a esa reflexión a medio plazo, el primer ministro de Luxemburgo, Xavier Bettel, lanzó a su llegada a la cumbre un mensaje contra la energía nuclear, que considera que no es «ni limpia, ni verde».
«Hay que encontrar alternativas», dijo el jefe de Gobierno del Gran Ducado sobre una fuente de energía que países como República Checa o Polonia ven como posible alternativa al carbón.