El senado de México aprobó leyes que regulan a la polémica Guardia Nacional
EFE
El Senado de México aprobó este martes las leyes que regularán el funcionamiento de la polémica Guardia Nacional, un cuerpo policial con el que el Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador busca atacar la ola de inseguridad y violencia en el país.
Los senadores avalaron los dictámenes que expiden las leyes de la Guardia Nacional, sobre el Uso de la Fuerza y sobre el Registro de Detenciones, y aprobaron modificaciones a la Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
Los cuatro dictámenes fueron aprobados sin votos en contra de los senadores y recibieron la abstención de Emilio Álvarez Icaza, que si bien fue elegido como candidato de la coalición formada por los partidos Acción Nacional (PAN), de la Revolución Democrática (PRD) y Movimiento Ciudadano, no forma parte de ninguna bancada.
De acuerdo con los dictámenes aprobados, que fueron remitidos a la Cámara de Diputados para su análisis y eventual ratificación, «la Guardia Nacional será una institución policial, civil, disciplinada, profesional» adscrita a la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana y cuyo objetivo será realizar la función de seguridad pública a cargo de la Federación.
En su caso «podrá celebrar convenios con las entidades federativas y municipios, a efecto de realizar, de manera temporal, tareas de seguridad pública de competencia local».
Las leyes facultan al presidente de la República para asignar elementos provenientes de las Fuerzas Armadas, quienes después de vencer el plazo máximo de participación militar en la corporación (cinco años) podrán ser reasignados por el mismo jefe del Ejecutivo a sus unidades originales.
También establecen que los integrantes de la nueva corporación deberán estar funcionalmente separados de su institución armada de origen y someterse a la disciplina, fuero y cadena de mando de la Guardia Nacional.
El nuevo cuerpo podrá realizar operaciones encubiertas y de inteligencia «para la prevención de los delitos». Asimismo, todo el personal de la Guardia será evaluado anualmente en el desempeño de sus funciones.
El coordinador de la bancada del gobernante Movimiento Regeneración Nacional (Morena), Ricardo Monreal, celebró el consenso alcanzado para aprobar las leyes secundarias a la reforma constitucional que crea la Guardia Nacional, que entró en vigor el 27 de marzo.
«Sabíamos del gran reto que representa la inseguridad pública. Enfrentarlo con instrumentos tradicionales no hubiera dado resultados, pero ocultar el desafío de enfrentarlo frontalmente tampoco hubiera dado resultados», aseveró.
Miguel Mancera, coordinador del PRD, declaró que los textos aprobados incorporaron «muchos de los temas que la sociedad civil y los organismos internacionales han planteado».
El líder de bancada del Movimiento Ciudadano, Dante Delgado, declaró que los senadores trataron de ser «lo más escrupulosos y exigentes porque así lo demandaba este momento y porque debíamos plasmar en el acta de nacimiento de la Guardia Nacional un sello inequívocamente civil».
La Guardia Nacional tendrá el objetivo de reducir los altos índices de delincuencia que sufre el país, que el pasado año registró 33.341 asesinatos, siendo el más violento de la historia de México desde que empezaron los registros en 1997.
Este organismo causó polémica en un inicio dado que el presidente López Obrador pretendía que tuviera una dirección militar, lo que fue criticado por la oposición y organizaciones defensoras de derechos humanos.
Consideraban que este organismo perpetuaba la «militarización» del país, donde el Ejército está presente en las calles desde la Presidencia de Felipe Calderón (2006-2012) y ha sido acusado de cometer violaciones a los derechos humanos.
Finalmente, tras un acuerdo entre todos los partidos políticos, se estableció que la Guardia Nacional tendrá un carácter civil, una dirección policial y los militares solo participaran en ella durante cinco años, para luego regresar a los cuarteles.