El autismo y las habilidades musicales, una experiencia fascinante
Redacción 800Noticias / PijamaSurf
En un nuevo estudio del Centre for Research in Autism and Education del UCL Institute of Education de Gran Bretaña se encontró que los individuos autistas verdaderamente desarrollan una capacidad auditiva mucho más elevada que el resto. Según las conclusiones de la investigación, el autismo “realza la discernimiento de tonos, y aumenta la capacidad de percepción auditiva”.
Para este estudio se analizó la reacción de 40 personas, 20 de ellas con autismo y 20 sin éste, todas entre un rango de 17 y 34 años. En el primer ejercicio, los participantes fueron expuestos a grabaciones de sonidos de animales; entre éstos se jugó con un sonido que podía confundirse con los ladridos de un perro o los rugidos de un león: los individuos con autismo tuvieron un puntaje mucho mayor respecto a la distinción contundente de sonidos. También se les mostró un audio de una fiesta donde las conversaciones eran casi imperceptibles; los participantes debían seguir el flujo de las mismas y se les preguntó el desenlace de la última; el 47% de las personas con autismo pudieron discernir la frase, mientras que sólo el 12% de aquellos sin esta enfermedad lo consiguieron.
Los autistas suelen disfrutar de la música con tonos más ecuánimes. Estas investigaciones abren el espectro de factores a estudiar para comprender mejor las diferencias perceptuales de estas personas, lo que se traduce en tratamientos más apropiados y en una mejor comprensión sobre cómo el exterior les afecta de maneras inimaginables para nosotros.
En 1912 el suizo Eugen Bleuler acuñó por primera vez el término autista, el cual construyó a partir del griego αὐτὀς (autos) que significa «uno mismo». Desde entonces, esta enfermedad comenzó a estudiarse cada vez más, y aunque queda bastante camino por resolver, hoy sabemos que se trata de un trastorno en el neurodesarrollo prenatal (el cual se manifiesta entre los primeros 2 años de vida) con fenómenos como la poca o casi nula interacción social y un comportamiento repetitivo y restringido, entre otros.
Quizás, a simple vista, lo que más caracteriza a una persona autista (como bien señaló Bleuler) es que se encuentra sumamente inmersa en su mundo, uno que asociamos a su interior, aunque estudios recientes muestran que también está altamente vinculada al exterior, ya que su manera de percibir es distinta.
Respecto a la música, se sabe que muchos de ellos pueden desarrollar un genio musical y el vínculo no es azaroso: en algunas investigaciones recientes se ha descubierto que las personas con autismo son mucho más sensibles a los sonidos y tienen una mayor capacidad para distinguir un mayor rango de tonos.
MUSICOTERAPIA
La musicoterapia, es una disciplina del área de la salud, que utilizada de manera dosificada, facilita cambios positivos y significativos en el comportamiento humano. Cimentada sobre experiencias musicales diversas, utiliza como herramientas específicas los instrumentos musicales u otros elementos y objetos que facilitan y promueven la apertura de canales de comunicación. Cada sesión es cuidadosamente planeada, llevada a cabo y evaluada para cubrir las necesidades propias y específicas de cada niño, ya que lo que resulta útil y curativo para un paciente autista puede no serlo para otro.
A los fines de encarar un tratamiento con éste tipo de pacientes, es importante saber que la musicoterapia dinamiza no solamente en lo puramente somático, motriz, sensorial, sino también, y lo que es más importante, en un amplísimo campo psíquico, cognitivo y comprensivo (percepciones, emociones, afectos, consciencia). Además relaja en el estrés, la ansiedad, la angustia de base existente en este tipo de patologías. Esta relajación predispone a la concentración, a la toma de contacto con la realidad exterior, a la autodefinición, a la comunicación. Facilita la sociabilidad y el acercamiento con otros individuos.