EEUU reitera importancia de imponer tope al precio de crudo ruso
EFE
La secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen, insistió hoy en la necesidad de acordar un mecanismo para imponer un tope al precio del crudo ruso que «ayude a los consumidores de todo el mundo» sin tener que incurrir en prohibiciones directas.
«Sin el tope a los precios (del crudo ruso), con una prohibición veríamos seguramente precios mucho más altos a nivel global», dijo este jueves Yellen en una rueda de prensa en Bali (Indonesia), antes de participar en una reunión de ministros de Finanzas y gobernadores de bancos centrales del G20 el viernes y sábado en dicha isla.
Yellen sostuvo que «no hemos decidido sobre un número adecuado» para el precio máximo de la venta de petróleo ruso, posibilidad ya contemplada en la declaración final del G7 tras su encuentro a finales de junio en Elmau (Alemania) para evitar prohibiciones al transporte de crudo desde Rusia.
Sería, dijo, «un número que dé a Rusia un incentivo para seguir produciendo», de otro modo «la alternativa a un tope en el precio es simplemente que la Unión Europea y Estados Unidos probablemente impongan prohibiciones», añadió Yellen.
«Eso provocaría el cierre de pozos en Rusia, y queremos asegurarnos de que tienen un incentivo para producir», consideró la secretaria del Tesoro de EE.UU..
Yellen ha estado abogando por este tope al precio del crudo ruso desde hace meses y es uno de sus principales objetivos en su viaje a Asia, donde visitó Tokio esta semana antes de desplazarse a Bali.
La Unión Europea (UE) adoptó en junio el sexto paquete de sanciones a Rusia por la invasión de Ucrania, que incluye un embargo al petróleo ruso que llega por vía marítima y contempla excepciones para el que llega por oleoducto a países sin acceso al mar como Hungría, República Checa o Eslovaquia.
Yellen anticipó que hablará sobre la intervención al coste del crudo ruso con sus socios del G20, las principales economías industrializadas y en desarrollo, entre las que están China e India, países que esperó que «vean que un tope en los precios también sirve a sus intereses, pues son importantes importadores».
Rusia ha redirigido una gran parte de sus exportaciones de crudo y productos de petróleo a países de la región de Asia-Pacífico tras la invasión a Ucrania y las sanciones por parte de Occidente, y, según Moscú, tiene la capacidad de atender la creciente demanda allí.
La secretaria del Tesoro estadounidense enfatizó que su encuentro con sus colegas del G20, en el que también participará Rusia, no se sabe aún si en persona o por videoconferencia, «no será como cualquier otro» por la guerra de Ucrania.
«Pienso expresar en los términos más firmes mi opinión sobre la invasión de Rusia y el impacto en Ucrania y en el la economía global», prometió.
Sus declaraciones se producen un día después de que se revelara que la inflación en junio subió en Estados Unidos un 9,1 por ciento, una tasa no vista desde 1981, achacada en gran medida por Yellen este jueves al auge de los precios energéticos por la invasión rusa.