Dos tercios de los latinos de EEUU no disponen de ahorros para imprevistos
EFE
Dos tercios de los latinos de Estados Unidos no disponen de un mínimo de 500 dólares ahorrados para hacer frente a imprevistos, lo que los deja en una situación de vulnerabilidad financiera superior a la del resto de la población.
Según una encuesta publicada este miércoles, la mayoría de los latinos no podrían responder a una situación de emergencia que les obligara a gastar más dinero del que ingresan cada mes, y el 36 % de ellos se han visto obligados en algún momento a pedir dinero a amigos o familiares para situaciones de este tipo.
«Millones de trabajadores latinos, incluyendo el 70 % que son considerados esenciales, ayudaron a sostener la economía durante la pandemia, pero su salud financiera está sufriendo por falta de acceso a crédito asequible y seguro», dijo en un comunicado Janet Murguía, presidenta de UnidosUS, organización impulsora de la encuesta.
El sondeo, realizado entre 1.200 latinos por la firma encuestadora BSP Research, halló que entre los principales problemas financieros de los hispanos en EEUU están el alto endeudamiento, la falta de ahorros y el poco acceso a productos bancarios asequibles.
Aunque la mayoría de los hispanos usan las mismas entidades financieras que el resto de estadounidenses -es decir, no recurren a bancos especializados en esta comunidad-, únicamente el 56 % disponen de tarjeta de crédito, frente al 84 % del conjunto de la población.
Además, el 15 % no tiene abierta una cuenta bancaria (5,4 % para el total de la población) y más de un tercio de los encuestados dijeron no estar seguros de que podrán pagar sus deudas en los próximos diez años.
«Urgimos a la Administración del presidente Joe Biden, a los reguladores y a la industria bancaria a trabajar juntos para garantizar que los latinos tengan las mismas oportunidades de acceder a un crédito asequible que el resto de la población», añadió Murguía.
Las dificultades en el acceso al crédito para los latinos se traducen en problemas a la hora de, por ejemplo, comprar una vivienda, algo que el 57 % de los encuestados considera demasiado caro, el 50 % dice no tener suficientes ahorros y el 39 % lamenta que los tipos de interés sean demasiado elevados.