Dos fenómenos climáticos que pesan sobre la temperatura
AFP
El Niño y La Niña son fenómenos climáticos recurrentes con múltiples impactos sobre la meteorología mundial, capaces respectivamente de aumentar y reducir la temperatura del planeta.
Ambos fenómenos pueden durar entre 9 y 12 meses y se producen con una frecuencia de entre 2-7 años, con periodos “neutros” en los cuales ninguno de los dos se manifiesta. Tampoco tienen por qué alternarse, puesto que uno u otro pueden tener lugar de forma sucesiva.
Los dos perturban los ciclos de precipitaciones tropicales y la circulación atmosférica.
En general, un episodio de El Niño genera menos lluvias de lo normal en Australia oriental, Indonesia, Filipinas, India, África austral y el norte de Brasil, pero estas son potencialmente más abundantes en el oeste de Sudamérica, África del Este ecuatorial y el sur de Estados Unidos.
En muchas regiones, La Niña tiene impactos opuestos.
Ambos pueden provocar una modificación sustancial de la temperatura mundial, al alza en el caso El Niño, a la baja para la Niña.
Actualmente, no hay ningún consenso científico en cuanto a la influencia del cambio climático sobre la frecuencia de ambos fenómenos.
Por último, actualmente ya es posible prever con varios meses de antelación la llegada de uno de estos fenómenos, lo que podría permitir anticipar los riesgos sobre por ejemplo la agricultura y la gestión del agua.