Detienen a un hombre que trató de abrir una puerta en pleno vuelo en EEUU
EFE
Un hombre ha sido detenido por supuestamente intentar abrir una puerta de emergencia y después tratar de apuñalar en el cuello a uno de los auxiliares de un vuelo que cubría la ruta de Los Ángeles a Boston, informó este lunes el Departamento de Justicia de EE.UU. en un comunicado.
El pasajero, que quedó arrestado este lunes tras comparecer ante una jueza del Distrito de Massachusetts, se enfrenta ahora a un delito de interferencia en la seguridad del avión y contra los miembros de la tripulación con el agravante de utilizar un arma peligrosa.
El suceso se produjo este domingo cuando el varón, que responde al nombre de Francisco Torres (33 años) y reside en Massachusetts, activó una de las palancas de la puertas de seguridad y accionó la manilla que despliega el tobogán de emergencia 45 minutos antes de aterrizar en el Aeropuerto Internacional de Logan (Boston).
Uno de los auxiliares del avión se desplazó hasta la puerta tras recibir la señal de alarma y logró restablecer la seguridad de la tripulación. Posteriormente, uno de sus compañeros le informó que el pasajero después detenido había sido el responsable de mover las palancas.
Tras esto, según el escrito de la acusación, el varón mantuvo una discusión con el personal de este vuelo, operado por la compañía United Airlines, en la que eludió su culpabilidad y aseguró que los no tenían pruebas para incriminarlo.
El capitán de la aeronave fue notificado de que Torres suponía una amenaza, por lo que debía aterrizar lo antes posible y este hecho despertó la furia del pasajero, que se abalanzó contra uno de los auxiliares mientras portaba una cuchara de metal rota, tratando de herirlo en el cuello hasta en tres ocasiones.
El resto de tripulantes colaboró entonces para inmovilizar a Torres, quien fue detenido inmediatamente después de aterrizar en Boston.
La vista del caso ha sido fijada para este jueves y Torres podría enfrentarse a una pena que contempla escenarios como la cadena perpetua, 5 años de libertad vigilada o una multa cuyo importe máximo ascendería a los 250.000 dólares. EFE
