Detectado un brote de covid-19 en hotel sede de la Cumbre Iberoamericana
EFE
Diez de los diecinueve trabajadores del complejo hotelero Sport Hotels Resort & Spa, donde mañana miércoles se celebrará el plenario de la XXVII Cumbre Iberoamericana de jefes de Estado y de Gobierno, están confinados tras dar positivo por covid-19.
Según ha informado Andorra, organizadora de la cita, el protocolo sanitario establecido ha permitido detectar y confinar a los diez positivos y a sus contactos estrechos, quienes están siguiendo «un estricto control epidemiológico de sus posibles cadenas de contagio».
La Cumbre estaba programada para noviembre de 2020 pero fue pospuesta debido a la pandemia del coronavirus y la imposibilidad de celebrarla de manera presencial.
Finalmente, Andorra propuso un formato semipresencial en el que solo se desplazan al Principado cuatro delegaciones de países miembros: España y Portugal, por cercanía geográfica, y Guatemala y República Dominicana, anterior y siguiente sede de la Cumbre.
«Los protocolos de cribado han funcionado correctamente y continuarán llevándose a cabo diariamente con todas las personas involucradas de una manera u otra con este evento», ha destacado el gobierno andorrano.
El protocolo sanitario se ha establecido entre el Ministerio de Salud y la Fundación de la Cumbre Iberoamericana para acoger «con las máximas garantías» el encuentro de los mandatarios.
Ayer lunes y hoy está teniendo lugar el XIII Encuentro Empresarial de manera semipresencial, pero con una gran presencia de empresarios físicamente en Andorra.
El protocolo sanitario es el mismo en dicho encuentro, donde se realiza una prueba diaria de antígenos a todas las personas que acceden al recinto.
Asimismo, los asistentes acreditados deben hacer uso de una mascarilla FFP2 o tipo quirúrgica en los actos incluidos en la agenda de la Cumbre y el Encuentro Empresarial.
La pasada semana también se detectó un brote en el Ministerio de Asuntos Exteriores andorrano, que afectó entre otros a la titular, María Ubach, y que obligó a confinar a prácticamente todo el equipo que estaba al frente de la Cumbre.
Pese a ello las autoridades aseguraron que el calendario de la Cumbre no se vería alterado y que para seguir con el normal funcionamiento se contrataría al personal necesario para suplir esas bajas.