Denuncian detención «arbitraria» de excoronel que pidió dimisión de Ortega
Fuente: EFE
El coronel retirado del Ejército de Nicaragua Carlos Brenes Sánchez fue detenido por las autoridades del país que lo acusan de sospechoso de cometer los delitos de terrorismo, crimen organizado, entorpecimiento de servicio público y daño agravado, informó este martes un movimiento político.
«Denunciamos y condenamos la detención arbitraria del excoronel Carlos Brenes, coordinador del Movimiento de Retirados del Ejército», señaló el denominado Frente Amplio Democrático (FAD), integrado por dirigentes de la antigua principal fuerza opositora de Nicaragua, en una declaración.
Brenes, de 63 años y miembro del FAD, fue detenido por sus excompañeros del Ejército cerca de la frontera de Peñas Blancas, que comparte Nicaragua con Costa Rica, y entregado a la Policía Nacional, afirmó ese movimiento.
«El Ejército, lejos de garantizar la seguridad y la libre movilización de los nicaragüenses, está actuando como un órgano represor que facilita las detenciones arbitrarias», criticó el FAD, que demandó al sector privado a que llame de inmediato a un paro nacional como una medida de presión para que se libere a todos los «presos políticos».
Brenes está siendo acusado, junto a los mayores retirados del Ejército, Tomás Maldonado Pérez, Rudy Antonio Palacios Vargas y Roberto Danilo Samcam, entre otros, por varios delitos, entre ellos terrorismo en perjuicio de Estado.
Samcam, también critico de Gobierno, huyó junto con su familia de Nicaragua, según dijo, como una forma de garantizar su seguridad y la de los suyos, sin especificar el país en que se encuentra.
En tanto, Brenes es el mismo que el 16 de mayo pasado, en nombre de oficiales en retiro del extinto Ejército Popular Sandinista (EPS), leyó una proclama demandando la salida del poder del presidente Daniel Ortega y de su esposa y vicepresidenta, Rosario Murillo, a quien responsabilizan de la crisis sociopolítica que atraviesa este país.
La lectura la hizo en la simbólica plaza pública del barrio indígena de Monimbó, municipio de Masaya, 23 kilómetros al sureste de Managua, un antiguo bastión de los sandinistas y que hasta mediados de julio fue uno de los principales focos de la resistencia contra el Gobierno en la actual crisis.
Desde abril, miles de nicaragüenses han salido a las calles a protestar contra Daniel Ortega, dentro de una crisis que ha dejado entre 322 y 448 muertos, según organismos humanitarios internacionales y locales, mientras el Gobierno reconoce 198 fallecidos y denuncia un intento de golpe de Estado.
Las manifestaciones contra Ortega y Murillo comenzaron el 18 de abril pasado por unas reformas de la seguridad social, finalmente retiradas, y se convirtieron en una exigencia de renuncia del mandatario, después de once años en el poder, con acusaciones de abuso y corrupción.