Denuncian centro español de menores migrantes por maltrato e insalubridad
EFE
Dos abogadas han denunciado las condiciones de insalubridad y maltrato de un centro de acogida de menores inmigrantes de la isla española de Lanzarote (Atlántico), adonde llegaron por mar desde el continente africano, en pleno debate político sobre el reparto de miles de estos niños por toda España.
La denuncia, presentada ante la Fiscalía y el Defensor del Pueblo, se apoya en fotografías adjuntas para describir deficiencias como falta de limpieza, de sábanas, de baños aptos y entre cucarachas y hormigas, además de una alimentación poco saludable.
En el escrito, al que tuvo acceso EFE, las letradas Irma Ferrer y Loueila Sid Ahmad Ndiaye advierten de que la situación en la que se encuentran los 55 menores en la Casa del Mar de Arrecife, capital de la isla, constituye un caso de «desprotección infantil», que provoca en los chicos tal malestar físico y psicológico que algunos optan por huir.
«La dirección del centro les empuja a vivir en la calle en condiciones infrahumanas, a pesar de ser menores tutelados» por el gobierno (regional) de Canarias y las autoridades insulares.
La Fiscalía de Canarias ya inspeccionó ese centro el 6 de mayo y apreció deficiencias «serias», que puso en conocimiento de la Dirección General de Protección a la Infancia del gobierno de Canarias de inmediato, según corroboró a EFE la fiscal responsable de Extranjería de la provincia insular de Las Palmas, Teseida García.
Sin embargo, precisa, sus responsables alegaron entonces que iban a cerrar en 15 días. «¿Cómo es posible que no esté cerrado ya?», se pregunta Teseida García, quien concluye que no cabe más que llevar a los chicos a otro centro, «porque eso no se arregla en dos días con ellos dentro».
En el escrito, las dos abogadas denunciantes insisten en la situación: «Espacios muy sucios, descuidados, con cables sueltos por todas partes, pinturas escamadas, sofás viejos y rotos (…) En la cocina se ven unos fregaderos muy sucios, con hormigas y se reporta también la presencia de cucarachas».
También dicen que los menores han sufrido episodios de malos tratos, de violencia, de insultos e, incluso, han soportado expresiones racistas por parte de los responsables del centro, gestionado por una fundación privada para el gobierno de Canarias, responsable de la tutela de los chicos.
También advierten de que «la mayoría de los niños» acogidos en la Casa del Mar de Lanzarote «no están escolarizados» y que no se controla si los que están matriculados van a la escuela o no.
Las Canarias sufren una fuerte presión migratoria desde el continente africano, desde donde miles de migrantes se dirigen a las costas españolas en embarcaciones precarias, en las que también viajan menores, unos acompañados y otros no.
En el caso de estas islas, se considera que su cupo de acogida es de 2.000 menores y, según el gobierno regional, actualmente hay casi 6.000 menores no acompañados en las islas. EFE
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