Decretan toque de queda para menores tras disturbios en ciudad panameña Colón
EFE
Las autoridades de la ciudad panameña de Colón, paralizada por un movimiento de protesta cívico con brotes de vandalismo que dejó cuatro policías heridos y 35 personas detenidas, decretaron toque de queda para los menores de edad por razones de seguridad.
La medida, que entrará a regir a partir de las 18.00 hora local (23.00 GMT), fue ordenada por la gobernadora de Colón, Jenith Campos, quien exhortó a todos los padres de familia a que de manera «responsable atiendan a sus hijos y los mantengan en casa».
Campos indicó que el toque de queda se establece por seguridad ya que este lunes «a altas horas de la noche», según videos que dijo haber revisado, vio a muchos menores de edad en las calles.
La gobernadora, que no precisó hasta que hora regirá el toque de queda, reiteró que la medida se toma en razón de que hay que salvaguardar la seguridad y la vida de las personas.
Además de los actos de vandalismo contra algunos locales comerciales y de enfrentamientos con unidades policiales, las manifestaciones han tenido repercusiones en la labor de los tribunales de justicia.
La Policía Nacional (PN) señaló en un comunicado que al menos cuatro de sus agentes fueron heridos con objetos contundentes, al igual que un civil que resultó lesionado.
Además, 35 personas han sido detenidas «por su vinculación en saqueos a comercios, atentar contra la vida de unidades de la PN, daños a la propiedad, vandalismo y alteración del orden público», añadió.
Detalló además que seis comercios fueron vandalizados al igual que un vehículo, al tiempo que se decomisaron seis bombas incendiarias molotov.
El Órgano Judicial (OJ) informó que el Pleno de la Corte Suprema de Justicia «suspendió los términos judiciales en el día de hoy, específicamente en el Distrito de Colón, tras los disturbios que se registran en esta parte de la provincia».
Además, «por motivos de seguridad, se ordenó el desalojo del edificio del Sistema Penal Acusatorio» en esa ciudad, donde las labores de los tribunales se reanudarán mañana, indicó el OJ.
Por su parte, el gerente general de la Zona Libre de Colón, Manuel Grimaldo, invitó al diálogo y anunció que la zona franca trabajará normalmente «por la responsabilidad que conlleva salvaguardar los empleos y la inversión».
El Frente Amplio por Colón (FAC), una plataforma donde convergen varias organizaciones civiles, inició hoy una protesta en toda la provincia caribeña contra el plan de renovación urbana que está impulsando el Gobierno panameño y que, en su opinión, esconde un proceso de gentrificación.
La renovación de Colón fue adjudicada en junio de 2015 al consorcio Nuevo Colón, formado por la brasileña Odebrecht y la panameña Constructora Urbana (CUSA), por 537 millones de dólares, aunque se espera que el costo final sea mayor.
Los manifestantes denuncian que el plan oculto del Gobierno es presuntamente echar a los colonenses pobres del casco viejo y «vender la ciudad a los ricos».
También protestaron contra la falta de infraestructuras, en especial la falta de agua, y contra la violencia que anualmente se cobra decenas de víctimas
Colón, ubicada a orillas del Mar Caribe y a 80 kilómetros al norte de la capital, es una de las ciudades más pobres y conflictivas del país, pese a que alberga la zona franca, de que tiene importantes puertos, además de la entrada Atlántica del canal interoceánico y en construcción una enorme planta de gas natural.