De la cocina a la medicina, IBM apuesta a la inteligencia artificial a gran escala
Nueva York, Estados Unidos | AFP. Ganó el juego de televisión «Jeopardy». Publicó un libro de cocina. En el futuro, tal vez cure el cáncer. IBM tiene grandes ambiciones para su súpercomputadora Watson, que representa un gran triunfo en su esfuerzo de reinvención.
Burritos de carne y chocolate, postres con tocino y champiñones: éstas son algunas de las recetas que el «Chef Watson» propuso degustar en una conferencia organizada esta semana en Nueva York por el grupo informático estadounidense para demostrar las posibilidades de su súpercomputadora.
Y, de paso, convencer a los desarrolladores a crear nuevas aplicaciones.
«Watson nos da los ingredientes para hacer un plato, seleccionados para que vayan bien juntos», y luego un verdadero cocinero imagina una receta, explicó James Briscione, director de desarrollo culinario de la escuela de cocina ICE de Nueva York.
Concretamente, detalló, se le indica a la computadora qué tipo de preparación se quiere hacer (ensalada o burrito, un plato o un postre, a la portuguesa o a la coreana…) y un primer ingrediente. A partir de allí, Watson agrega otros tres. Y, cada vez, «es una combinación de ingredientes que a nadie se la habría ocurrido».
Watson ha ingerido miles de recetas de la revista Bon Appétit para entender la composición básica de los platos. También tiene una base de datos de composiciones químicas de los alimentos para determinar los principales matrimonios de sabores.
Si, por ejemplo, propone casar fresas con champiñones, lo hace porque comparten un compuesto químico.
Los mejores resultados están en un libro lanzado en abril. La aplicación reivindica varios miles de usuarios, pero «Chef Watson» es apenas una de las aplicaciones de esta súpercomputadora.
«Todos estamos dispuestos a hacer negocios», afirma Florian Pinel, jefe ingeniero del proyecto. Han tenido conversaciones con supermercados y grupos alimentarios, pero hay otras declinaciones en sectores como la salud.
El grupo farmacéutico Sanofi quiere utilizar a Watson para encontrar nuevos usos para medicamentos ya existentes.
– Sin límites –
Watson, bautizado así por el primer presidente de IBM, Thomas Watson, combina dos nichos prometedores en torno a los cuales la centenaria empresa busca reinventarse: el «big data» (cantidades masivas de datos que genera la creciente digitalización de la sociedad) y la «nube» (servicios inmateriales en línea).
Con esto en mente, a principios de 2014 IBM anunció 1.000 millones de dólares en inversiones en una nueva división consagrada exclusivamente a este proyecto en desarrollo desde hace años, que abrió a cooperaciones comerciales. Cerca de una veintena de sectores de actividad están involucrados actualmente.
En el terreno de la salud, uno de los más prometedores, IBM acaba de crear una plataforma dedicada (Watson Health) con la cual el grupo farmacéutico Johnson & Johnson o el fabricante de bombas de insulina Medtronic buscan concebir sistemas de control pre y post operatorio y tratar a los diabéticos.
Además, IBM anunció esta semana su asociación con 14 clínicas y centros de salud estadounidenses especializados en el tratamiento del cáncer, que empezarán a usar la súpercomputadora Watson para acelerar análisis de ADN y determinar tratamientos personalizados para sus pacientes.
Mientras que los médicos pasarían semanas estudiando cada mutación y la literatura científica existente, Watson es capaz de obtener resultados en «pocos minutos», asegura IBM, destacando que esto podría permitir que una mayor cantidad de pacientes acceda a tratamientos adecuados.
En materia de finanzas, Watson correlaciona los datos de los clientes de un banco con las notas de los analistas sobre ciertos productos para ayudar a los asesores de inversión. En el comercio, facilita la comparación entre diferentes productos disponibles y determina cuál se adapta mejor al comprador.
Y en el sector petrolero, la firma británica Arria imaginó integrar Watson a su sistema de vigilancia de fugas en las refinerías.
«La aplicabilidad de la tecnología no tiene límites, siempre que haya grandes cantidades de datos», dijo Mike Rhodin, vicepresidente de IBM a cargo de Watson.