De 1958 a 2024: Larga lucha por la democracia y la justicia
800 Noticias/ Sikiuk Méndez
El 23 de enero de 1958 fecha histórica que resuena en la historia de Venezuela. Se cumplen 66 años de ese día en que una alianza entre el pueblo venezolano y sectores de la Fuerza Armada Nacional lograron derrocar la dictadura de Marcos Pérez Jiménez. Este golpe de Estado marcó el fin de la dictadura y Pérez Jiménez, se vio obligado a abandonar el país rumbo a la República Dominicana.
Tras su derrocamiento, Venezuela estableció un gobierno de transición bajo la dirección del almirante Wolfgang Larrazábal.
El director del Instituto de Investigaciones Históricas de la UCAB, Tomás Straka, destaco en una entrevista que el significado del 23 de enero de 1958 es tan profundo que aún no existe una versión general y consensuada sobre la salida de Pérez Jiménez. La discusión continúa porque las opiniones sobre el 23 de enero tienen un impacto inmediato en las percepciones actuales. «Por ejemplo, se debate sobre el papel de los militares y la capacidad de la sociedad para resolver sus problemas». dice Straka. Este diálogo en curso refleja la relevancia continua de este hito histórico en el pensamiento contemporáneo.
Por su parte el sociólogo Francisco Coello resaltó en el Ucabista el papel crucial que desempeñaron los partidos políticos, liderados por Rómulo Betancourt, en el proceso que siguió al histórico 23 de enero de 1958.
“Estos partidos políticos no solo plantearon una propuesta de transición política, sino también una visión para el país, con sus respectivos aciertos y desaciertos. A través del lente de la sociología política, observamos un liderazgo fuertemente marcado por Betancourt, respaldado por las mentes más brillantes de su tiempo en los ámbitos político e intelectual. Existía una élite política capaz de conceptualizar el futuro del país; una inteligencia política que podía dirigir un evento y crear las condiciones para el cambio. Los partidos políticos son agentes de modernización y Betancourt lo comprendió bien, los respaldó porque entendió que la democracia necesita un sistema de partidos para el juego político”, explicó Coello.
Avanzamos hasta 2024 y encontramos a Venezuela en un punto crucial. Las elecciones presidenciales de este año podrían dar continuidad al chavismo, que lleva un cuarto de siglo en el poder, o ponerle fin. La continuación del levantamiento temporal de sanciones, incluyendo las relacionadas con el petróleo y el gas, anunciado en octubre por Estados Unidos, dependerá de los pasos que dé Venezuela para garantizar unas elecciones presidenciales competitivas.
Además, en 2024, Venezuela se encuentra en una posición de responsabilidad ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) debido a al conflicto territorial en curso con Guyana. También se anticipa la inauguración de una oficina perteneciente a la Fiscalía de la Corte Penal Internacional (CPI), cuyo objetivo será proporcionar asistencia técnica.
En el aspecto económico en 2023 se vio un ligero repunte en algunas áreas, lo que llenó de optimismo a los comerciantes. Sin embargo, la inflación desmesurada continuó devorando la economía, aunque bajó un poco durante los últimos meses del año.
La comparación entre estos dos momentos históricos muestra cómo la lucha por la democracia y la justicia sigue siendo una constante en la historia de Venezuela. Aunque los desafíos y el contexto han cambiado, el espíritu de resistencia y esperanza del pueblo venezolano permanece inalterable. Esta es la verdadera esencia de Venezuela, un país que, a pesar de las adversidades, sigue luchando por un futuro mejor.
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