David Rubin continuará como presidente de la Academia de Hollywood
EFE
El presidente de la Academia de Hollywood, David Rubin, continuará en el cargo tras ser reelegido este martes para seguir al frente de la institución cinematográfica que cada año organiza los Óscar.
Rubin, que es director de casting, fue elegido en 2019 y relevó en el cargo a John Bailey, que estuvo al frente de la Academia durante dos años.
La trayectoria profesional de Rubin como director de casting incluye, entre muchas otras, cintas como «Fried Green Tomatoes» (1991), «The Addams Family» (1991), «The English Patient» (1996), «Romeo + Juliet» (1996), «Men in Black» (1997), «My Best Friend’s Wedding» (1997), «The Talented Mr. Ripley» (1999) y «Hairspray» (2007).
La Junta de Gobernadores de la Academia aprobó además la continuidad de Lois Burwell como primera vicepresidenta en el organigrama de la institución.
Larry Karaszewski seguirá como vicepresidente, un cargo que también desempeñarán a partir de ahora Isis Mussenden y Wynn P. Thomas.
Jim Gianopulos fue elegido tesorero de la Academia, un puesto que ya desempeñó en el pasado; y Janet Yang debutará este año como secretaria de la institución.
Rubin afrontará varios desafíos de importancia para la Academia debido a la crisis del coronavirus.
La pandemia ha tenido consecuencias demoledoras tanto en la producción como en la exhibición en Hollywood, con los rodajes parados y las salas de cine cerradas durante meses, por lo que el calendario tradicional de premios se ha visto alterado de arriba a abajo.
Así, los Óscar, que se iban a celebrar el 28 de febrero de 2021, se aplazaron hasta el 25 de abril.
El 28 de febrero será el límite de estreno para las películas que quieran ser candidatas a unos Óscar que, por primera vez en su historia, incluirán cintas que se hayan estrenado en internet por no poder verse en las salas debido al cierre de los cines por la pandemia.
Por otro lado, la institución aplazó hasta el 30 de abril de 2021 la apertura del Museo de la Academia de Hollywood, un ambicioso centro en Los Ángeles (EE.UU.) llamado a convertirse en un lugar de peregrinación para los amantes del cine pero cuya gestación está siendo muy complicada tras acumular varios años de retrasos y contratiempos.