Cuida tu cuello y escote con el tratamiento kaula
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Sin duda alguna, la piel de nuestro cuello y escote revelan nuestra verdadera edad. Este lugar del cuerpo no miente, y muestra la salud, elasticidad y cuidados que le hemos dado a nuestra piel durante los años.
Cuando pensamos en tratamiento de belleza, siempre nos enfocamos en nuestro rostro. Nos preocupamos por hacerlo lucir joven, sin imperfecciones y con una piel tersa, pero sin darnos cuenta, nuestro cuello y escote cuentan toda la verdad sobre el paso de los años.
Por ello, existe el tratamiento kaula, que se encarga de cuidar esta parte del cuerpo sobre los efectos de la edad y la exposición a los rayos solares, ayudándonos a prevenir y retrasar la aparición de arrugas y piel colgante, así como también la deshidratación, y la falta de uniformidad en el tono de la piel.
Tratamiento Kaula
Este tratamiento se basa en un retensionado de la piel del cuello y escote aplicando una limpieza nutritiva, activación y energización dérmica, peeling reparador y estimulador, reafirmación y definición de contorno más la aplicación de mascarillas y nutrición de la piel, todo en un mismo tratamiento.
El sol, los malos hábitos de belleza o simplemente el no cuidarnos, van generando una acumulación de células muertas que se propagan en estas zonas del cuerpo que poseen una piel muy sensible, delicada y fina, lo que genera irregularidades, piel colgante y manchas en la piel.
De manera que kaula protegerá el tejido de estas partes del cuerpo, del paso del tiempo, la gravedad, y la exposición al sol. Pero se debe acotar que este tratamiento es exclusivo a las zonas antes mencionadas. No se debe aplicar en otras partes del cuerpo. Para ellas deberás utilizar tratamiento y cremas especiales para ella.
¿Cómo aplicarlo?
Para obtener resultados óptimos con el tratamiento kaula, se deben seguir los siguientes pasos.
– Antes que nada, deberás desmaquillar muy bien las zonas, dando un ligero masaje para ir preparando la piel.
– Luego, tonifícala con una mezcla de gingko biloba y pantenol. Esto activará la microcirculación de la zona, lo que la preparará para absorber adecuadamente el resto del tratamiento.
– Una vez la piel preparada, se debe aplicar un peeling dual (doble acción), donde se eliminarán las células muertas acumuladas y estimular la regeneración celular. Con este paso se corregirá la pérdida de tono, que ayudará a eliminar las manchas o irregularidades en el tono de piel.
– Acto seguido, se deberá realizar un masaje con liposomas. Este frote transportará antioxidantes y coenzimas Q10 a la capa más interna de la dermis. Para conseguirlo puedes aplicar un suero Triple R, que contenga aminoácidos y enzimas. Estas ayudarán a darle elasticidad a la piel, mejorando las arrugas, además de formar una estructura 3D de fibras de elastina y colágeno, dándole soporte a la piel.
– Llegó el momento de aplicar una mascarilla de efecto térmico para activar el metabolismo celular y estimular la regeneración de la piel. Esto gracias al calor que aumentará el flujo sanguíneo, provocando una acción energética en la piel. Este calor favorecerá la sudoración, eliminando toxinas.
– Para culminar, se debe realizar un masaje específico para la zona de cuello y escote, que contenga activos antiedad, nutrientes, reafirmantes y reparadores, dándole luminosidad a la zona dejándola tersa.