Cuida tu cabello con aceite de jojoba
Agencia.- Shampú, acondicionador, ampolletas, cepillos, todos soñamos con tener un cabello espléndido, fuerte y sano de raíz a punta. Si quieres añadir brillo, suavidad e hidratación a tu melena, considera usar el aceite de jojoba, una especie de cera líquida con una composición similar a los aceites naturales que produce el cuero cabelludo.
La jojoba (Simmondsia chinensis), de acuerdo con Natural Medicines, empresa de investigación internacional sobre medicina alternativa, es un arbusto nativo de los desiertos de Arizona, California y México. Su aceite (o cera líquida) químicamente corresponde a una cera natural formada por una cadena larga de ácidos grasos y alcoholes. Dicha estructura es la que permite que se pueda refinar fácilmente para su uso cosmético.
Las propiedades de la jojoba están en sus semillas, en las que se acumulan una altísima concentración de ceramidas (más del 96%), este grupo de sustancias son las que le permiten mantener sus propiedades intactas ante el paso del tiempo o al exponerse al calor, por lo que actúa como reguladoras de la humedad y equilibran la producción de grasa.
Además, la jojoba contiene ácido linoléico, un componente que favorece el proceso de regeneración celular, y vitamina E, un nutriente esencial para tener un cabello saludable.
El aceite de jojoba penetra fácilmente en el cabello y en el cuero cabelludo, por lo que es un gran aliado para revertir el daño provocado por el uso continuo de la secadora, la plancha o los químicos de los productos comerciales y tintes. Este aceite favorece la hidratación de tu cabello y es especialmente útil si lo tienes seco o áspero. Además, ayuda a limpiar los residuos que pueden bloquear la producción natural de la grasa capilar.
Para aplicar aceite de jojoba en tu cabello, simplemente necesitas verter una cucharadita del aceite en la palma de tu mano (agrega más aceite si lo necesitas y tienes el cabello muy largo). Frótalo en tus manos para esparcirlo y aplica con las puntas de tus dedos. Enfócate en las puntas y el cuero cabelludo. También puedes compra una botella pequeña con rociador que te permita esparcir el aceite de una manera más uniforme, es decir, un rocío fino, en lugar de la capa gruesa que aplicas con tus dedos. Diluye el aceite con agua para que no obstruya el rociador. Déjate toda la noche o al menos un par de horas antes de que tomes una ducha.
Recuerda que así como la piel, el cabello también es el reflejo de nuestra alimentación y cualquier déficit vitamínico, mineral o proteico puede ocasionar debilidad, fragilidad y caída de cabello. El pelo crece aproximadamente 1 cm cada mes, y la base para ese crecimiento son los nutrientes de la dieta. Cuanto más sana sea, más fuerte y saludable crecerá la melena.