Si pensar en limpiarte la nariz con un pañuelo te da pavor, sabes de qué hablamos: molestia, ardor, enrojecimiento, a veces picor, otras, dolor, etc. Son algunos de los síntomas de la irritación nasal que van asociados, principalmente, a los resfriados y las alergias. Sin embargo, pueden tener también otras causas.
La irritación de la nariz es una sensación desagradable, muy molesta e incómoda de la que pocas personas -o puede que ninguna- se habrán librado.
Además, la irritación nasal supone en muchas ocasiones un problema estético, pues toda la zona enrojece, se reseca, se descama y puede llegar incluso a agrietarse.
CAUSAS DE LA IRRITACIÓN NASAL
RESFRIADO / GRIPE
Estas dos patologías tan frecuentes, sobre todo en invierno, provocan congestión nasal y una abundante mucosidad. Esto tiene como resultado que nos sonemos con mucha frecuencia, causando la irritación de la piel y su descamación.
ALERGIA
La rinitis alérgica es una de las formas de alergia respiratoria más frecuente, y se presenta con un goteo nasal prolongado. Esto hace que nos sonemos más a menudo, resecando la piel, volviéndola más sensible e irritándola.
SINUSITIS
La sinusitis es otra de las patologías que aparecen acompañadas de mucosidad y de la necesidad de sonado nasal. Por tanto, puede convertirse en la causa de una irritación de la zona.
ROCES Y PEQUEÑAS HERIDAS
Cualquier elemento que nos cause roce en la zona puede ser el origen de una irritación: las bufandas en invierno, las bragas deportivas cortavientos que se utilizan en los deportes al aire libre, etc.
También la aparición de una herida o corte puede originar una irritación de toda la zona.
MALA HIDRATACIÓN
La nariz no es una zona de la que solamos preocuparnos especialmente a la hora de hidratarnos. Sin embargo, es una zona muy expuesta que requiere también de los cuidados adecuados.
CALEFACCIÓN Y AIRE ACONDICIONADO
Tanto las calefacciones como los equipos de aire acondicionado suelen producir un ambiente seco que afecta a la piel y las mucosas, no solo las nasales.
CLIMA
El aire, el viento, el frío, los cambios bruscos de temperatura, la radiación solar excesiva, etc. Todos ellos son fuente de posible irritación de la piel, y la de la nariz no es una excepción.
POLUCIÓN Y TABACO
El humo del tabaco contiene numerosas sustancias tóxicas e irritantes que afectan de manera especial a la zona nasal al respirarlo.
Los contaminantes presentes en el aire de nuestras ciudades también pueden causar irritaciones de la piel.
¿CÓMO PUEDES PREVENIR LA IRRITACIÓN?
Porque es mejor no solo acordarse de Santa bárbara cuando truena, adelántate y evita la irritación:
- Cuida el ambiente, sobre todo si tienes alergia, eliminando en la medida de lo posible las sustancias que te afecten.
- Si tienes una patología, sigue el tratamiento que tu médico te haya recetado para controlarla.
- Procura mantener tus defensas fuertes. Así será más difícil que te enfermes y aparezcan la congestión, la mucosidad y todos los síntomas que te irritarán la nariz.
- Suénate suavemente. Sé delicado a la hora de limpiarte la nariz,
- Evita los pañuelos de papel que, si bien son muy cómodos y más higiénicos, también resecan e irritan con más facilidad la piel. Es preferible el uso de pañuelos de tela que son más suaves con la piel.
- Mantén una hidratación adecuada en la zona. No dejes el bálsamo o crema hidratante nasal sólo para cuando el problema ya ha aparecido.
- Hidrátate también por dentro. No te olvides de tus 8 vasos de agua, infusiones, calditos, etc.
CONSEJOS PARA CUIDAR LA NARIZ IRRITADA
Los cuidados para una nariz irritada son similares a los que debemos realizar si existen heridas:
- Higiene adecuada de la nariz con agua tibia, nada de agua caliente, y jabón suave que no aumente la irritación.
- No te seques la nariz arrastrando, hazlo con una toalla suave o una gasa y con ligeros toques.
- Con la piel ya seca, aplícate un bálsamo o una pomada que sea hidratante y reparadora. Repite la aplicación cada vez que tengas que sonarte.
- Evita tocarte la nariz. El roce con las manos, el pañuelo o cualquier otra cosa aún te producirá más irritación. Además, las manos suelen ser una buena fuente de gérmenes que podrían agravar la irritación causando infección.
- Si tienes que sonarte hazlo de la manera más suave que te sea posible. Mejor a suaves toques que arrastrando y apretando la nariz con el pañuelo.
- Para evitar la sequedad ambiental, usa humidificadores o haz baños de vapor.
- Hidrátate de manera correcta, por dentro bebiendo agua o infusiones y por fuera con productos específicos para la zona de la nariz.
- Si te molesta el enrojecimiento, puedes camuflarlo utilizando un poco de corrector, maquillaje o una crema hidratante con color.
No te olvides de cuidar tu nariz, mantenla limpia e hidratada. Así evitarás estos molestos síntomas tan característicos del otoño y el invierno.