Crece tensión entre Rusia y Turquía tras nuevos incidentes aéreos
Beirut, Líbano | AFP | Nuevos incidentes aéreos acrecentaron este martes la tensión entre Turquía y Rusia, que prosiguió sus bombardeos en Siria.
Una fuente militar siria afirmó que se habían registrado bombardeos rusos en la ciudad de Palmira (centro de Siria), pero Moscú desmintió estas informaciones.
Según Moscú, sus aviones bombardearon el martes 12 objetivos del grupo yihadista Estado Islámico (EI) en los alrededores de la ciudad de Deir Ezzor (este) y en las provincias de Damasco, Idleb y Latakia.
El ejército turco denunció el «acoso» que sufrieron sus aviones F-16 por parte de un MiG-29 no identificado en la frontera siria, después de que la OTAN acusara el martes a Rusia de ingresar en el espacio aéreo de Turquía durante sus operaciones en Siria.
Las fuerzas armadas turcas también se refirieron a otro caso de «acoso» de esos mismos aviones por baterías de misiles tierra-aire desplegados en territorio sirio.
Previamente, también este martes, la OTAN había acusado a Rusia de haber violado intencionalmente en dos ocasiones el espacio aéreo turco durante sus operaciones en Siria.
«No es un accidente. Se trata de una seria violación», afirmó el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, aludiendo a los incidentes del pasado fin de semana entre aviones rusos y turcos cerca de la frontera siria.
El presidente islamo-conservador turco, Recep Tayyip Erdogan, exhortó a Rusia a «no perder la amistad de Turquía». «No podemos sentarnos y mirar, tolerar esto», dijo Erdogan.
El sábado, dos aviones turcos habían interceptado un caza ruso, obligándolo a dar media vuelta. Según Moscú, esta incursión del espacio aéreo turco duró apenas «unos segundos» y se debió a «malas condiciones climáticas».
El aeropuerto donde están basados los cazas rusos, cerca de la ciudad siria de Latakia, está a menos de 50 km de Turquía. La aviación rusa bombardea posiciones rebeldes cerca de la frontera sirio-turca.
– Moscú desmiente bombardeos de Palmira –
El ejército ruso negó este martes haber bombardeado posiciones del grupo EI en la ciudad siria de Palmira y sus alrededores, desmintiendo una información anunciada por la televisión pública siria.
«Nuestra aviación en Siria no ataca localidades pobladas, más aún si hay monumentos arquitectónicos», declaró el portavoz del ministerio ruso de Defensa, el general Igor Konachenkov, citado por las agencias rusas.
La televisión siria, que citaba a una fuente militar, anunció el martes por la mañana que la aviación rusa bombardeó posiciones del EI en Palmira, en coordinación con las fuerzas aéreas sirias.
Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), una ONG con sede en Gran Bretaña, los rusos realizaron al menos 30 bombardeos sobre Palmira la noche del lunes, que dejaron al menos 15 muertos entre las filas yihadistas.
En pleno desierto, en el centro de Siria, Palmira es conocida mundialmente por su casco antiguo, declarado patrimonio de la Humanidad.
Desde que el grupo yihadista Estado Islámico (EI) tomó el control de esta ciudad en mayo, ha destruido varios de sus monumentos milenarios. Este grupo yihadista considera como objetos de idolatría las obras religiosas preislámicas, principalmente las estatuas.
– Las operaciones «van a extenderse» –
Durante la primera semana de operaciones rusas en Siria, que fueron solicitadas por el presidente sirio Bashar al Asad, los cazas rusos buscaron prioritariamente cortar los nexos entre los rebeldes en las provincias del centro, del norte y del oeste de Siria, afirmó un alto responsable militar.
Este responsable dijo al diario libanés al-Akhbar que «los bombardeos rusos se centran, en una primera etapa, en posiciones donde están concentrados grupos armados, en la intersección de diferentes provincias». Dio como ejemplo la ciudad de Talbise y de Rastan, que une Homs a Hama, o Jisr al-Chughur, entre Idleb y Latakia.
Estas posiciones están bajo el control de islamistas y del Frente Al-Nosra, el brazo sirio de Al Qaida, que han estado en el radar de los bombarderos rusos en varias ocasiones.
Una fuente militar siria dijo a la AFP que las operaciones «siguen en la primera etapa» pero que «se extenderán y durarán varios meses».