Correa anticipa nueva «bomba» informativa contra el Gobierno ante elecciones
EFE
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, anticipó este jueves que este viernes se conocerá una nueva «bomba» informativa para tratar de perjudicar al oficialismo en las elecciones del domingo y dijo que detrás de ello estaría «alguien que perteneció al Gobierno».
En un encuentro con periodistas en Milagro (suroeste), el mandatario advirtió que la información que se conocerá ha sido preparada por los hermanos William y Roberto Isaías, exbanqueros radicados en EE.UU. y cuya extradición reclama el Gobierno para que respondan por delitos financieros.
Se trata, dijo Correa, de «un desesperado último intento», de «otra mentira más, desesperada, para tratar de cambiar los resultados del próximo domingo, tratar de afectar las elecciones».
«Yo creo que no lo lograrán, la decisión de un pueblo ya está tomada», declaró el mandatario, quien precisó que en el caso estaría involucrado «un nuevo traidor, probablemente por billete (dinero)», según la información que posee.
Correa hizo también un balance de la campaña electoral que finalizará a la medianoche de hoy y la calificó de «mediocre» y de «festival de mentiras» en el que algunos candidatos han ofertado a los votantes «cosas que ya se están haciendo» y propuestas «ridículas».
Dijo que «ha sido una campaña de muy bajo nivel» que no ha despertado pasión ni entusiasmo, excepto por parte del binomio oficialista, formado por el exvicepresidente y candidato a sucederle Lenín Moreno y el actual segundo mandatario, Jorge Glas, como revelan, en su opinión, las «imágenes multitudinarias» de sus actos electorales.
Para Correa, en cambio, la campaña electoral ha demostrado el hecho positivo de que Ecuador «vive una democracia vibrante en lo formal», pues la democracia real debe ofrecer a los ciudadanos, entre otras cosas, igualdad de oportunidades y derechos de los que el país andino aún esta lejos, señaló.
El mandatario, con todo, destacó la estabilidad alcanzada en lo político durante los diez años de su gobierno frente a los «grandes sobresaltos» que se vivían en la época anterior a 2006.