Consejos para hacer magia y disfrutar en Disney

Cuatro parques temáticos, 25 resorts, un centro comercial y gastronómico, un complejo deportivo, cuatro campos de golf… Walt Disney World duplica en superficie a la isla de Manhattan. Y es la tierra de la fantasía. Aquí el castillo de Cenicienta pasa del hielo al fuego en apenas segundos, invita a cenar como en París o Marruecos, a sobrevolar California en ala delta sintiendo el aroma de sus pinos o a desplomarse en caída libre por el ascensor de un hotel abandonado.

Cada año, miles de turistas llegan en su primera visita con la valija colmada de expectativas, pero también interrogantes. Informarse y planificar es la mejor forma de ahorrar dinero, disfrutar la experiencia a pleno y minimizar el margen de error. A continuación, las respuestas a las dudas más comunes.

¿Qué fechas y días es mejor evitar?

Las épocas de mayor concurrencia son en primer lugar las dos semanas de Navidad y Año Nuevo; luego, Pascua, el spring break (la semana del 21 de marzo) de los norteamericanos, Acción de Gracias (cuarto jueves de noviembre), y desde principios de junio a mediados de agosto, época de vacaciones en el hemisferio norte.

Cuando Walt Disney World se llena, se llena en serio: dos horas de cola para cada atracción e incluso pocos días del año pueden cerrar el ingreso de gente a los parques con carteles que indican full (lleno), hasta tanto se vayan liberando. Si piensa pasar el 24 de diciembre o el 31 en Magic Kingdom, sobre todo, llegue bien temprano. Es el parque que suele alcanzar primero el tope de su capacidad. También hay que recordar que, en cualquier época del año, los días de semana suelen estar más vacíos que los fines de semana.

¿Conviene hospedarse adentro o afuera de los parques?

Ambas opciones tienen pros y contras, que dependen en parte del tipo de familia y sus costumbres, a la hora de definir la mejor opción.

Disney ofrece una gama de hoteles para todos los presupuestos: Value, Moderate, Deluxe y Deluxe Villa Resort, según su propia calificación. Parar en ellos ofrece ciertas ventajas, como horas extra en los parques (llamadas extra magic hours), traslados gratuitos (un ahorro de 20 dólares diarios, que es el costo del estacionamiento en los parques), envío de compras directamente a la habitación del hotel y la posibilidad de un plan de comidas.

Alojarse afuera de Disney puede ser más barato, sobre en las épocas pico. Los hoteles básicos parten desde los 60 dólares, como el Champions Resort o el Hawthorn Suites, y de ahí en más hay una enorme gama de opciones, incluso muy cerca de los parques. Si se trata de un grupo grande, de una familia de seis o dos familias que viajan juntas, por ejemplo, alojarse en una casa o townhouse fuera de los dominios de Disney es una opción interesante (desde 500 dólares la semana, aproximadamente), además de brindar mayor comodidad e intimidad para todos. Una casa también ayuda a abaratar comidas, al desayunar y eventualmente cenar allí. Los sitios donde encontrar este tipo de oferta son www.vrbo.com y el mismo www.airbnb.com

¿Qué tickets comprar?

Hay pases tanto para uno como para diez días. Mientras el básico es válido para visitar un parque por día, la opción del pase hopper habilita a saltar de uno a otro en la misma jornada. Esta última alternativa, al ser más cara, no se justifica en una primera vez o al viajar con niños pequeños, ya que con suerte el tiempo alcanzará para recorrer un parque entero en una jornada. Todos los pases vencen a los 14 días de su primer uso.

Otra posibilidad es comprar los tickets pagando el adicional de water park fun & more. Esta opción ofrece ingreso a los dos parques de agua (Typhoon Lagoon y Blizzard Beach), dos minigolfs, el ESPN Wide World of Sports y un campo de golf de nueve hoyos por la misma cantidad de días extra de los que incluye el ticket. Es decir, si el pase es por cinco días, por otros cinco más podrá visitar las mencionadas atracciones. La única excepción es para aquellos que compran el ticket por un solo día, ya que el pase habilita a dos visitas de parque de agua y más.

Recomendación: para una primera visita lo ideal es un pase de cinco días para dedicar una jornada a cada parque (y repetir, un día, el que más gustó).

¿Cuándo y dónde comprar los tickets?

Si bien los pases pueden comprarse en la entrada a los parques, conviene hacerlo con anticipación vía la página web de Disney, agencias de turismo locales o revendedores online autorizados, como Orlando Fun Tickets, Official Ticket Center o Maple Leaf Tickets, entre otros. Estos sitios ofrecen tentradas con algún descuento (no es gran cosa, pero según la cantidad de días se puede conseguir de 2 dólares a 20 dólares menos) y envío gratis a un domicilio en Estados Unidos o por email.

Para aquellos que se hospedan dentro de Disney, la compra de los pases ya vendrá acoplada a su estadía. Para quienes se hospedan afuera, es importante comprar los pases al menos 30 días antes de la fecha prevista del viaje, para poder emitir sus FastPass.

¿Qué es el FastPass?

La ventaja de comprar los tickets con anticipación es la posibilidad de no hacer cola en los juegos. Disney tiene un sistema gratuito de reservas para sus atracciones llamado FastPass, que permite acortar significativamente las colas de los juegos más concurridos y asegura lugares preferenciales en shows y desfiles. Quienes se hospedan en los hoteles de Disney pueden reservarlos con 60 días de anticipación como máximo, el resto hasta 30 días antes de la fecha de visita.

Cada persona puede emitir en un primer momento tres FastPass. Las reservas se hacen en la página web https://disneyworld.disney.go.com/plan/my-disney-experience// o, más sencillo aún, bajando la aplicación para smartphones My Disney Experience. Allí es necesario ingresar el número de ticket para crear un usuario y seleccionar los FastPass de una lista de atracciones y horarios designados para su grupo.

El FastPass queda asociado al ticket de entrada, que puede ser una tarjeta plástica o la pulsera en caso de hospedarse en los hoteles de Disney. Una vez que se usan los tres emitidos o se vence la hora de la última reserva, se puede volver a sacar en el mismo día otro FastPass en kioskos específicos ubicados por los parques.

Salvo por Animal Kingdom, que tendrá un espectáculo nocturno el año próximo, los restantes tres parques tienen su show de cierre. Si quiere disfrutarlos a pleno, todos ofrecen la opción de tener un lugar preferencial mediante el FastPass.

¿Qué hay que tener en cuenta al viajar con niños pequeños?

Si planea visitar Disney con niños pequeños, asegúrese de llevar un coche. En los parques los alquilan simples y dobles (15 dólares por un día, 13 dólares por más días el simple; 31 dólares y 27 dólares respectivamente el doble). En caso de uno o más niños no puedan o quieran subir a un juego, se puede hacer el llamado baby swap o rider switch. Esto quiere decir que pueden hacer la cola todos juntos, y sube un adulto mientras el otro se queda con los niños, y al cambian posiciones, para no dejar a los niños solos. Para ello es necesario avisarle al personal del juego.

En todos los parques hay lugares donde encontrar a los personajes, sacarse fotos y pedirles autógrafos. Muchos incluso tienen la opción FastPass. Si bien los personajes icónicos están en todos los parques, algunos son específicos a su temática. En Magic Kingdom está el abanico más grande de opciones, 35 personajes repartidos en diferentes puntos de encuentro, entre ellos muchas de las princesas desde Blancanieves hasta Anna y Elsa, de Frozen, Winnie Pooh y Tigger, Mary Poppins e incluso secundarios como las hermanastras de Cenicienta. En Epcot hay 16 personajes que representan una selección de los de Magic Kingdom, y vale la pena buscarlos ya que suelen estar menos demandados. En Disney’s Hollywood Studios hay 19 personajes como la Doctora Juguetes, Phineas y Ferb, monstruos de Monsters Inc, Princesita Sofía, o Jake y los Piratas. Animal Kingdom tiene a Tarzan, Flik, o el oso Baloo entre sus exclusivos.

Disney ofrece la posibilidad de desayunar, almorzar o cenar con ellos. En todos los casos, los personajes paran mesa por mesa. Conviene reservar con anticipación. El restaurante más demandado es Cinderella’s Royal Table, en el segundo piso del castillo. Olvídese de intentarlo sin reserva previa, los lugares se agotan incluso varios meses antes. Es la figurita más difícil.

Fuente: La Nacion